No tuvimos el placer de ir, pero por las crónicas que están saliendo nos estamos arrepintiendo bastante: dos horas de retraso (salieron a las doce), gritos de «hijos de puta», cervezas al aire, gritos de «gordo» a Axl Rose
y pidiendo el regreso de Slash, solos imposibles, más gritos de «me aburro»… Lo dicho, una lástima no haber ido.