Pegadizas melodías pop en cada uno de los 10 temas que componen ‘Euro deluxe dance party’, una producción elegante que no recuerda al tecnopop más vulgar sino más bien a Saint Etienne y a Erlend Oye (las guitarras a The Cure), y letras bobísimas pero divertidas son sus aclamados ingredientes. La decepción es la linealidad de un disco que parece precipitado y un poco holgazán y en el que, a pesar de lo encantadoras que resultan todas las pistas, en especial ‘Your brother is my only hope’ y ‘Show me your penis’, se confunden muy fácilmente unas canciones con otras. 6
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