Tras un inicio apoteósico un poco Pet Shop, suena el single ‘Hush Boy’, una pequeña decepción en su flamante carrera de sencillos que, sin embargo, mejora con las escuchas y sobre todo prestando atención a la letra, tan alcohólica, sobre una chica que le dice a su chico que tienen que ir más despacio (entre otras cosas). Este tema y ‘On the train’, como el disco de Christina Aguilera, beben con acierto de la vieja escuela, el soul y el jazz.
La mejor canción me parece ‘Hey u’. Entre el trance y el tango, es como una canción de Eurovisión pero por una vez no improvisada, sino bien arreglada desde el primer segundo hasta el final. ‘Take me back to your house’ y ‘U R on my mind’, con un punto Craig Armstrong, también me gustan. Y hablando de Craig Armstrong, la letra de ‘Lights go down’ parece recién salida del ‘Ray of light’… Por el contrario, el gapo a lo Missy Elliot que es ‘Run for cover’ me chirría, por playero, hacia el supuesto clímax, al igual que el momento Bollywood de ‘Everybody’; mientras que ‘Smoke Bubbles’, a pesar de lo que parece un sample de ‘Psicosis’, me deja un poco igual. Como siempre, el grupo parece un poco capaz de lo mejor y lo peor, pero por las 5 canciones que están muy bien, merece la pena. Por cierto, si a alguien le apetece apoyarlos, este disco no se está vendiendo precisamente muy bien… 7.