El maduro y solitario Don Perlimplín decide, por insistencia de su criada, tomar en matrimonio a la bella y joven Belisa. Desesperado al descubrir que su atractiva esposa se ve con otros hombres idea un plan para recuperar ese cuerpo que anhela con deseo enfermizo. En japonés y con sobretítulos, el texto lorquiano adquiere una nueva dimensión que, desde la primera escena, engancha entre la sorpresa y la estupefacción de ver cómo sobre un mismo espacio dos culturas tan diferentes pueden llegar a trasmitir tanto. Con el fin de enriquecer algunos personajes femeninos se ha aderezado el texto con fragmentos de ‘Ligazón’ de Valle Inclán que, si bien nos saca momentáneamente de «los mundos de Lorca», quedan perfectamente integrados en el mensaje que trasmiten sus protagonistas.
Erotismo, drama y poesía se entremezclan en una original puesta en escena bajo la dirección de Kei Jinguji, con una encantadora componente naíf que deja entrever una profunda madurez de fondo. Suena, por cierto, ‘Summer 78’ de Yann Tiersen y cierra la obra… ¿un tema de Muse? Aún podéis acercaros a verla los próximos sábado 23 y domingo 24 de septiembre al Corral de Comedias de Alcalá de Henares (Plaza de Cervantes, 15).