El referente claro del grupo parece Stereolab, además de Lali Puna, Broadcast o, en los momentos new-wave, Kraftwerk. Sin embargo, a pesar de que hacia el final del disco, el trío busca intensidades más profundas (‘Lark’, ‘The way to there’), acompañadas de unas cuerdas un tanto pretenciosas, lo que predomina, las diferencia y mejor les sale es su talante nostálgico pero optimista, que se deja ver en el mismo gospel luminoso que abre el disco, ‘The Lucky One’, o en las animadas ‘Night magestic’ y ‘Dark Halls’. 7
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