«Pido foie gras / y me lo como con completo desdén»; «en los 90, como adolescente, era optimista, pero ahora el terror ha irrumpido en la ciudad, en la ciudad, en la ciudad»; «The Daily Mail dice que el enemigo está entre nosotros, tomando a nuestras mujeres y quitándonos los trabajos»; «en mi tiempo libre intento evadirme haciendo crucigramas y sudokus»; «la MTV me enseñó a estar de mal humor, a no amar nada y a dejarme el pelo largo»
y referencias a madres que pierden a sus hijos y por supuesto a la ciudad de Berlín pueblan canciones con títulos como ‘Caza de brujas’.
Musicalmente, el grupo se acerca a las emociones de Coldplay (‘Sunday’) o Arcade Fire (‘Waiting to 7.18’) y a los temas más ambientales de U2 (‘On’). Menos mal que en algún tema aún se parecen a sí mismos, que les queda algún vocoder (‘Uniform’) y que el single, ‘The Prayer’, de estribillo rompedor, resulta un auténtico «grower». «Tonight make me magnificent