‘Volver‘ es una de sus mejores películas y ha sido la justa vencedora de una noche que en principio parecía dedicada a dar todos los triunfos a ‘El laberinto del fauno‘. No ha sido así, y aunque la coproducción hispano-mexicana ha recogido 7 premios (sonido, fotografía, maquillaje, montaje, efectos especiales…), se ha quedado sin los principales: Sergi López ha perdido frente a Juan Diego (‘Vete de mí), Maribel Verdú y Ariadna Gil frente a Carmen Maura y Penélope (estaba cantado, claro), y sólo en el mejor guión Guillermo del Toro ha podido subir al escenario, para además, dar las gracias a El Deseo por su apoyo. Era su película una historia compleja, original, arriesgada y excelente, aunque llegado este punto de fama y reconocimiento, algo imperfecta y edulcorada en su desenlace y en algún que otro momento de su desarrollo (¿cuántas veces vemos a Maribel Verdú escondiéndose el mismo cuchillito?).
Otros Goyas destacados de la noche han sido ‘Salvador‘ en el mejor guión adaptado, ‘Azuloscurocasinegro‘ en mejor actor de reparto (Antonio de la Torre) y en las categorías noveles (actor y dirección); Ivana Baquero, la niña de El laberinto del fauno’, en mejor revelación; Bebe en la mejor canción o ‘Alatriste‘ en dirección artística, de producción y vestuario. ¿La gala? 3.282.000 espectadores (un aceptable 20,5% de cuota de pantalla) presenció los mismos chistes de todos los años, algunos, de tan malos, intercambiables con equivocaciones de guión (¿qué les pasaba a Najwa y Dani Martín?), y otros, todo hay que decirlo, bastante divertidos, como ese principio con un falso premiado, tiroteado por plasta por Corbacho, o esas menciones a Daniel Brülh y Viggo Mortensen, que a diferencia de Almodóvar, sí estaban de cuerpo presente. Al final, hoy, todos más o menos contentos. Aunque Pedro igual está tirándose un poco de los pelos, porque ha quedado como un arrogante.