A la mayoría de los españoles se nos ha bajado el sueldo un 4% en los últimos diez años. ¡Qué alegría! Como está visto que de momento nos vamos a tener que seguir apretando el cinturón por todas partes, nada mejor que pasarse al low cost en todo lo que se pueda para no tener que privarnos de nada. Con la ropa ya sabemos dónde acudir para encontrar moda barata; con los viajes, los alojamientos y los restaurantes también. Yo voy a hacer algunas propuestas de cosmética y potingues -que he probado en mí y me han funcionado divinamente- que, si bien tienen un precio que no llega a los diez euros, cumplen sus funciones con eficacia. Sí, ojalá todos pudiéramos utilizar La Prairie, pero mientras no podamos, hay productos de gama baja estupendos y que difieren entre poco y nada de los de gama media (es decir, Lancôme, Biotherm, Givenchy…), y cuestan menos de la mitad. Y ya dejaremos la belleza de lujo para cuando se pueda.
Alisador de uñas Astor. Cuando te pintas las uñas, rara vez te quedan como una limpia superficie lisa porque resulta que el cuerpo no es perfecto y que tiene relieve, como las uñas en sí. Además de limártelas delicadamente con un pulidor, este alisador de Astor va fenomenal porque, además, endurece y fija el color. Con una capa de este producto, otra de esmalte de color y otra de brillo, garantizo una manicura divina, duradera y, sobre todo, lisa.
Anticelulítico Babaria. Da un poco de vergüencita pronunciar esta marca, pero una vez pasado el trago sus productos resultan ser muy buenos y muy low cost. Su anticelulítico de aloe vera es ligero, huele bien y realmente reduce la celulitis tanto como uno más caro (o sea, muy poco). Otra gran ventaja es que viene en formato tarro y se puede usar hasta la última gota, además de que siempre está de promoción y te regalan un 20% más (ver imagen) o una crema especial vientre plano. Un chollo, vamos.
Gama árbol de té de The Body Shop. Yo la utilizo desde la adolescencia, cuando empezaba a tener algún grano que otro y tampoco estaba como para el abrasivo Clerasil. Hay de todo: gel facial, jabón facial, tónico, hidratante, toallitas… Y no sólo son buenos para la piel grasa, sino que sus limpiadores son geniales para usarlos cada día, tanto hombres como mujeres. Mis preferidos, el tónico y el gel limpiador facial, que nunca faltan en mi armario. Su mayor defecto es que vienen en unos envases bastante grandes, de manera que llevártelos de viaje sin facturar es un poco engorro.
Máscara de pestañas Pump Up The Volume de Bourjois. Todas las máscaras de esta marca son excelentes, yo ya he usado varias y cumplen a rajatabla lo que pone en su etiqueta, algo de lo que muy pocos pueden presumir. En este caso, aumenta considerablemente el volumen de las pestañas y es waterproof de verdad, de manera que después de un par de horas no vas como un mapache con marcas de máscara en el párpado inferior. Además, hay varios colores que favorecen bastante sin dar mucho el cante, como el violeta, que resalta los ojos verdes.
Colonias Chupa Chups. Para ser fragancias para niñas y adolescentes, tienen un olor muy agradable, duradero y no excesivamente dulzón. Yo me he hecho súper fan del frasco amarillo (hay varios colores, cada uno con un nombre un poco ridículo que no plasmo aquí), que es muy fresquita, y como es tan barata te la puedes echar por litros porque no duele mucho comprarse otra. Todo un descubrimiento, sobre todo para la gente que luego te huele y alucina cuando les dices de qué marca es tu colonia.
Esmaltes Creative. Nunca jamás, y eso que me pinto las uñas como desde los doce años, había probado unos esmaltes que durasen una semana sin descascarillarse. Creo que son los mejores que he usado en mi vida, y tienen una gama de colores alucinante y, sobre todo, que cuando te los aplicas quedan igual que lo que ves en el botecito. Para las fans de las uñas bien brillantes y bien coloridas, lo mejor del mundo; para las fans de pintárselas una vez a la semana, ni os cuento ya.
Colonia Dulces Sueños de Johnson’s Baby. Volvemos a la cosmética para niños, pero es que hay algunos productos que no deberían tener edad, como esta colonia. Es muy fresquita pero tiene un toque dulce que hace que el olor no se vaya en cinco minutos. Aunque se supone que es para echársela a los bebés cuando se van a dormir, a los adultos nos sienta fenomenal por las mañanas, recién duchados, y a chorro limpio por todo el cuerpo. Estás todo el día con un olorcito maravilloso, palabra.
Hidratante Nutrilift de L’Oréal Paris. La mejor hidratante corporal que se ha inventado hasta la fecha, palabra, que yo he probado muchísimas. Aplicada por las mañanas después de la ducha, mantiene la piel suave y con un tacto como de bebé hasta veinticuatro horas después. Además, tiene otras ventajas como un olorcito de lo más agradable, que se absorbe pronto y que puede hasta con las pieles más secas. Yo la uso hasta de aftersun y after depilación.
Maquillaje Non Stop Coverage de Maybelline. A mí nunca me habían gustado las bases de maquillaje, ni las más caras, hasta que probé ésta. Es muy ligera, se aplica muy fácilmente con los dedos (como si fuera una crema hidratante), no deja la piel grasa, camufla casi todas las imperfecciones leves y se mantiene intacta sus buenas ocho horas. Además, proporciona un acabado bastante natural y no como de travesti a las cinco de la mañana. Hay muchos tonos para elegir, así que seguro que puedes encontrar uno parecido al tuyo.
Mascarilla Flex pelo liso, de Revlon. Las mascarillas capilares suelen ser bastante caras, incluso las que compras en el súper. Yo me hice con ésta por probar y descubrí que es bastante efectiva. Suaviza el pelo, lo deja visiblemente más hidratado y actúa en 5 minutos. El único defecto que le encuentro es que cuesta un poco aclararla, pero por lo demás es un producto muy útil para melenas largas y un poco encrespadas por culpa de un agua demasiado calcárea, como la de Barcelona, ya que da un poquito de lisura o lisez.