Durante sus años de retiro Dolores O’Riordan no ha aprendido a controlar sus espamos escénicos, que son bien feos, ni a tocar la guitarra (¿cómo se puede componer tocando tan mal?), pero no ha perdido su don de llevar a las masas donde ella quiere. Aunque ya no llene estadios y tenga incluso que traspasar sus conciertos de salas grandes tipo La Riviera a salas más reducidas tipo la Sala Arena, sus años de rodaje en la carretera al frente de una banda multiplatino incluso en Estados Unidos como fueron Cranberries, se notan. Así, cantó algunos de sus hits como ‘Ode To My Family’ a dos milímetros escasos de la boca de los fans de las primeras filas, o se echó un par de botellas de agua por encima para cerrar en ‘Dreams’, antes de escupir otro par de botellas al público. Y nadie se apartó, o sea que quizás esta chica (bromeó sobre su edad, no es para tanto, 36 años) tiene algo definitivamente a pesar de su cara de mala persona, atenuada por otra parte por un nuevo corte de pelo que la aguapa un poco.
El show empezó con ‘Zombie’, lo cual está muy bien porque es una canción muy confusa y un poco chunga que puede dar mucha pereza a mitad del show, pero que para caldear el ambiente es perfecta. Después fueron sonando temas de su disco en solitario, algunos de los cuales son bastante malos, como ‘Human Spirit’ o ‘Angel Fire’, pero otros dan el pego totalmente como la triunfal ‘Loser’ o ‘Apple Of My Eye’, uno de los villancicos de este año.
Como es obvio los momentos más emocionantes de la noche vinieron dados por las viejas. Aunque ahora convertidas en hits filo-Adult Top 40Kiss FM, vaya temazos siguen siendo ‘Animal Instinct’, ‘Ridiculous Thoughts’, o por supuesto ‘I Can’t Be With You’ y ‘Linger’. La banda nueva, unos jevos, disfrutó también mucho en ‘Salvation’, ‘Promises’, tan chusca en estudio como killer en directo o, una de las sorpresas, ‘How’. Aunque quizá me quede con la recuperación de ‘Shattered’. Porque hubo un día en que Dolores pudo haber resuelto su carrera en solitario escogiendo los caminos folkies de su Irlanda natal. No pudo ser y es una pena porque todos los pelos de punta, oiga. 8.