Ahora la mujer de Lucho, Clara Morán Calvo-Sotelo, sobrina de quien estás pensando, ha concedido una simpática entrevista a El País, en la que reconoce haber sido «una maripuri del tecno». Clara, que estuvo en Oviformia y Heroica, dice que ahora escucha cosas muy atormentadas, como Elliott Smith. El momento de la polémica viene cuando habla de la era del 95, época en la que cedieron sus temas a Fangoria, que a la postre serían los mayores hits de estos: todos los singles que editaron entre 1999 y 2002.
«En esa época componíamos para Fangoria, sobre todo Lucho, mi marido, temas como ‘No sé qué me das’, ‘Eternamente inocente’, ‘Hombres’ o ‘Electricista’ (sic)… Pero aquello, cuando llegó el dinero, acabó fatal. No hay ni lealtades ni amigos. Algún día habrá que contar bien la historia de Fangoria, y antes la de Dinarama. A Carlos Berlanga, el Serge Gainsbourg español, le pasó lo mismo».
Clara no especifica a qué se refiere y efectivamente hay quien echa de menos alguna composición de Lucho o los ex Le Mans en los discos de Fangoria, pero también es cierto que una de las premisas de la formación de Fangoria era la contribución a sus discos de varios autores. Debe de ser un pequeño trauma de Alaska y Nacho, después de que, en su etapa en Dinarama, Carlos no mostrase excesivo entusiasmo o no apareciese en las grabaciones de los temas en el estudio, como sucedió en ‘No es pecado‘.
La pena es que Lucho y Clara nunca tuvieron mucha suerte. Su historia la podéis leer en Popes80.com: primero formaron Oviformia, con cuyo nombre ni siquiera llegaron a grabar un LP, y después Heroica, con los que sí grabaron tres discos de repercusión moderada. Su mayor éxito como Oviformia fue este ‘Hablamos de nosotros’.
Gracias a Artista Adolescente por el enlace de El País en «Dudas y Sugerencias«.