Friendly Fires han sido una de las últimas confirmaciones del Festival de Benicàssim. Su propuesta entre el acid y el disco pasó por uno de nuestros Revelación o timo hace unos meses y el grupo terminó colando ‘Paris’ en nuestra lista de mejores canciones de 2008. Hablamos con su líder, Ed.
Antes de Friendly Fires, estuvisteis en una banda de hardcore como adolescentes. ¿Crees que vuestra experiencia os sirvió para un proyecto más electrónico como Friendly Fires?
Cuando empezamos a escribir, no queríamos hacer pop. Bueno, no éramos hardcore, éramos más bien como Fugazi. Al final estábamos más interesados en la música disco y escribir canciones pop terminó siendo una especie de desafío.
¿Crees que escribir canciones pop es más difícil?
Para mí, sí. Si estás escuchando este tipo de proyectos «arty» y de repente te encuentras una canción pop buena y pegadiza, te fascina.
¿Te ofende la gente que dice que hacer música electrónica es mucho más fácil porque son sólo maquinitas?
Hay gente que puede pensarlo, pero nosotros no somos completamente electrónicos en ese sentido. Sí, probablemente nos ayudó a tener un sonido más orgánico nuestro pasado.
Quizá Friendly Fires no es tan electrónico, pero soléis citar el sello alemán Kompakt como una de vuestras principales influencias, ¿qué grupos os llaman más la atención de este sello?
Sí, soy realmente fan de Justus Köhncke, de Superpitcher, que siempre fue una gran inspiración… Me encanta ese tipo de electro frío, que no tiene nada que ver con otras cosas. Lo disfruto un montón.
La prensa tiende a etiquetaros como acid de principios de los 90, música disco a lo Chic, sonidos actuales como LCD Soundsystem… ¿Cuál de estas comparaciones os agrada y os desagrada más?
No me importa que nos digan que somos disco, aunque nosotros no hacemos el mismo tipo de música disco de siempre, usamos diferentes elementos. Pero tampoco creo que hagamos canciones para bailar solo en una pista como LCD Soundsystem, nos centramos más en hacer canciones de pop.
También os soléis definir, sorprendentemente, como «shoegazers». ¿Qué os veis de «shoegazers»?
Me refiero al modo en que suenan algunas guitarras. Sé que probablemente no es la mejor palabra para definir nuestro sonido pero tenemos un componente «épico, cinemático» en las guitarras que me hace pensar eso. Pero bueno, nos gusta combinar cosas diferentes hasta que encontramos el sonido que nos gusta, tampoco buscamos ser «shoegazers».
¿Te imaginas un disco vuestro en el que os concentrarais en un solo tipo de sonido?
La verdad es que no sé cómo sonaremos en el futuro porque cada vez que grabamos una pista suena diferente a la anterior. No hemos elegido ningún sonido, tocaremos los instrumentos y veremos qué pasa. Quizá nos inspiremos en algo un poco más expresamente disco, más electrónico. El primer álbum lo grabamos con un solo micrófono, grabando cada instrumento por separado. Ahora tenemos dinero para comprar más micrófonos.
¿Te interesa especialmente la escena de clubs?
Sí, es lo último en que te apetece meterte cuando vuelves de una gira larga, pero sí, claro. Plastic People en Londres es un sitio no muy grande, pequeñito, pero el sonido es impresionante, nada suena mal. Tiene mi sonido favorito del mundo.
¿Por qué crees que hay tantas canciones sobre París?
Se relaciona con el romance, la felicidad… Sale en muchas películas. Nuestra canción habla más en abstracto sobre el futuro, sobre mirar al futuro.
¿Estabais bromeando de alguna manera en esta letra? Porque es un recurso muy manido…
Es bastante sentimental. Si sigues la letra literalmente, puedes pensar que sí, es igual que las películas. La verdad es que la escribí muy rápido, me gustó cómo sonaba y se quedó así. No me preocupo mucho por las letras. Creo que la música es muchísimo más importante. Cuando pienso en los Smiths, me gustan las letras de Morrissey, pero para mí no es tan importante como la música. Mira a Michael Jackson. Sus letras no es que fueran nunca gran cosa, y en cambio oír su voz es increíble.
¿Ahora que sois más famosos y podríais permitíroslo, vivirías en París?
La verdad es que no. Preferiría vivir en Alemania. Bueno, quizá en Colonia no, pero en Munich sí. Me encantaría ir allí a grabar nuestro próximo disco, en un ambiente diferente.
¿Y Berlín, conoces su escena de clubs?
He estado tres veces. Fui a un club gay, Berghain, pero estaba demasiado lleno. Espero poder conocerlo mejor otra vez. El concepto «underground» que tiene, abandonado en medio de la nada, me gustó mucho.
¿Crees que aparecer en el NME puede ser malo para un grupo porque a menudo crean hypes que se desinflan enseguida?
Sí, sé lo que quieres decir. A veces piensas: «Joder, no quiero hacer esta entrevista. Quiero hablar sobre música», pero si quieres ser alguien, tienes que estar ahí. Yo no quiero ser visto como «una banda NME», del tipo de Oasis. Pffff.
¿Tenéis previsto venir a España? (Nota Editor: pregunta realizada antes de la confirmación del FIB)
Quizá sí, pero no hay nada cerrado. Nuestro último concierto en España fue terrible. Fue en Razzmatazz y creo que la gente no estaba muy interesada en nosotros, así que nos gustaría volver y quitarnos el mal sabor de boca.