Desde ya y hasta el 6 de junio se celebra en Madrid la edición número 11 del Festival de Cine Alemán. Hoy se ha dado el pistoletazo de salida con el estreno de ‘Hilde’ y su productora, Judy Tossell, en rueda de prensa, ha hablado junto a uno de los organizadores sobre el esplendor del nuevo cine alemán, con películas como ‘El hundimiento’, ‘Goodbye, Lenin’ o ‘La vida de los otros’ a la cabeza. Según Judy, esta nueva tendencia es posible gracias a los años que han pasado desde la posguerra. Al fin va pasando el tiempo necesario para que los directores puedan hablar, por ejemplo, del lado humano de Hitler con cierta perspectiva. En el Festival podrán verse películas como ‘Berlin Calling’, ‘Hace un año en invierno’, ‘Pequeñas mentiras piadosas’ o ‘Espías’, esta de 1927, así como cortos y una retrospectiva sobre el 20º aniversario de la caída del Muro, con películas como ‘La promesa’. Horarios y precios (existen abonos de 3 películas) en la web oficial.
Un día, seducido por el encanto del Café Fatal en el SO36 de Berlín, que por cierto peligra por las protestas de los vecinos, pedí a un amigo que me grabara un CD con los mejores 20 temas de la canción alemana. En él no faltaban, no podían faltar, ‘Für mich soll’s rote Rosen regnen‘ o ‘Eins und Eins das macht Zwei‘ de Hildegard Knef. ‘Hilde’ es un biopic sobre esta cantante y actriz, que ya murió en 2002, pero permanece como una de las figuras clave de la cultura alemana.
Hilde nunca fue la mejor intérprete, lo cual termina siendo muy útil para la actriz Heike Makatsch, que ha cantado ella misma todos los temas. Como se recuerda en la película y decía Ella Fitzgerald, quizá fuera la «mejor cantante sin voz» que te puede venir a la cabeza. En la onda de Édith Piaf, junto a cuyo biopic este desluce un poco, sobre todo por su excesivo minutaje, Hilde aparece desde el primer plano como un icono pop totalmente glamouroso, al que reivindicar, querer y descubrir, aunque muchas veces tengas ganas de odiarlo o hasta sientas lástima de su lado más frívolo, decadente y equivocado.
Hilde es retratada en cierta medida como un ser incapaz de amar o de conocerse a sí misma. Y quizá por eso, la película dirigida por Kai Wessel, ha agradado tanto a los tres maridos que tuvo (aunque no se soporten entre ellos), incluido el que más le duró y que curiosamente no aparece, porque fue menos decisivo en su carrera como artista. Ellos, interpretados por unos guapísimos Dan Stevens y Trystan Pütter, son los grandes perdedores en su vida, por no hablar de su primer novio, el miembro del partido nazi Ewald von Demandowsky, interpretado por Anian Zollner. ¿En serio a Hilde le importa tan poco como parece qué fue de su vida?
Como ‘Control‘, en cuyo guión intervino poderosamente la mujer de Ian Curtis, a veces ‘Hilde’ parece más un homenaje a las parejas que a la verdadera estrella, pero como en aquel caso, el encanto de la película viene definido por esa falta de interés en ensalzar la figura de Hilde sin más, aquí con el añadido de retratar muy comedidamente momentos muy duros de la historia de Alemania. En condiciones adversas, vemos a Hilde fracasar y reponerse constantemente hasta que se encuentra a sí misma haciendo de la imperfección su perfección. Como las grandes. 7.
Podéis escuchar a Hildegard Knef en Spotify.