La cancelación de una de nuestras niñas mimadas, Lily Allen, nos hizo temer que definitivamente esta edición del FIB Heineken fuera un despropósito, pero nada más lejos de la realidad. La jornada del sábado fue una sucesión de aciertos.
Television Personalities: Poca gente viendo la actuación de un Dan Treacy totalmente colgado, que haría mucha gracia a sus fans de las primeras filas, que en ningún momento le pitaron, pero dejó boquiabierto al público casual que pasaba por la carpa Vodafone. Un despropósito continuado de no-canciones y berreos que te dejaba ojiplático. Si lo de meter ‘Human’ de los Killers al final de un tema fue ingenioso, que venga Dios y lo vea. Eso sí, del show no había manera de largarse. Era tan malo que enganchaba.
10 minutos de Bell X1: Al término de Television Personalities pudimos recordar lo que significa que un concierto suene bien y que un grupo toque bien, en este show lleno de banderas irlandesas en el que la gente no paraba de cantar emocionada. Especialmente en su final, en lo que podemos intuir es el clásico de Bell X1, ‘Flame’.
Unfinished Sympathy: El grupo dio un buen concierto en el Escenario Verde, aderezado con un sentido del humor basado en los manidos pero divertidos «gracias a los que habéis venido desde España» o «muchas gracias por dejarnos tocar en los países valencianos». También ofrecieron al público un «¿queréis que os toquemos una de la Lily Allen?». Nani.
Russian Red: En el mismo escenario en el día anterior La Bien Querida decía «sois un público fantástico» y David Rodríguez, a los coros, contestaba un medio sarcástico «sí, sí, fantástico». Las «gracias» de Russian Red son pueriles y naíf casi hasta lo angustioso, pero al tocar y cantar, que es lo que cuenta, arrasa. En un concierto tranquilo y correcto, aunque quizá algo lento de más, miles de personas corearon canciones como ‘They Don’t Believe’ o ‘Cigarettes’. Y por cierto, gran éxito de público, uno de los conciertos españoles más concurridos de todo el festival.
15 minutos de Maxïmo Park: Aunque entre varias personas reunidas ninguna conseguimos tararear ninguna canción de Maxïmo Park, su show no era de los precisamente aburridos. Su cantante Paul Smith no deja de dar caderazos mientras la pantalla proyectaba constantes contrapicados y presuponíamos las primeras filas de su concierto una locura total.
The Wave Pictures: El trío bromeó como muchas otras bandas sobre la enorme asistencia guiri, diciendo que ya tocarían para los británicos otro día, que ellos venían a tocar para los españoles. Las canciones de Wave Pictures tienen un encanto especial en lo musical (su cantante es un guitarrista tan bueno como resultón) y en lo lírico. Son tan monos intercalando temas propios con ‘Wild Thing’ y frases como «creo que me quieres pero necesito saberlo seguro» que conquistan a la primera escucha. Fueron muchos los que salieron encantados de su show, culminado con la excelente ‘I Love You Like A Madman’, sin conocerlos.
Franz Ferdinand: Alex Kapranos salió al escenario diciendo que había que olvidarse de lo que había pasado el viernes en el festival. La gente tenía ganas (el llenazo fue superior al de Oasis) y se consiguió. Uno de los mejores directos jamás vistos, curiosamente basado en un repertorio algo irregular, gracias a una conjunción de cosas muy sencillas de explicar: un sonido perfecto, las ganas de grupo y público de darlo todo y una puesta en escena bastante resultona. Geniales ‘The Dark Of The Matinée’, ‘Michael’, ‘Take Me Out’ y canción techno del final. 20/10.
2 Many Dj’s: Llenazo total en la sesión de 2 Many Dj’s en la que sonaron minutos sueltos de algunos de los clásicos del pop de todas las épocas. Hot Chip, la Human League, Eurythmics o The Gossip emocionaron a las masas que bailaban levantando los brazos mucho más que si estos grupos hubieran tocado en vivo. No faltó ni Chimo Bayo. ¿Quién les daría el soplo? Por cierto, grandísimo el espontáneo en bolas.
Miqui Puig DJ: Flojo el sonido de la carpa pop este año. Ni tirando de clásicos de los 90 y los 00 tipo ‘My Favourite Game’, la cosa terminó de arrancar esta vez. ¿Qué ha pasado?
Steve Aoki: Todo lo contrario en lo que suponemos la sesión de lo que, horario en mano, suponemos esta persona. Steve consiguió mantener a miles de fibers en pie dando botes durante el amanecer y terminó dando botes él mismo sobre el escenario a eso de las 7.45. Techno del bueno en una sesión muy Berghain que no sabríamos dónde encontrar en la gran ciudad. Where’s The Party?