Pero absurdos sueños infantiles aparte, lo cierto es que después de la pasada gala de los Goya nos apetecía repetir la experiencia de comentar en tiempo real la entrega de estos importantes premios aunque sólo sea porque todos alguna vez, bote de champú en mano, los hemos agradecido en la ducha. Será también nuestro particular intento de insuflar emoción a una noche que se presenta un pelín aburrida, a menos que el nuevo sistema de votos, que obliga a puntuar las películas a lo Eurovisión y va eliminando las menos votadas si no hay una mayoría absoluta, no da la campanada.
Y es que pocas sorpresas podemos esperar sabiendo casi de antemano que son dos de diez títulos (quién dijo que más es más) los que al final se disputarán la gloria: ‘Avatar’ y ‘En tierra hostil’, gatos del espacio contra marines, la paz contra la guerra, directores locos que dan tanto miedo como para que se modifiquen los sketches de la gala para que nada hiera su sensibilidad azul contra algunos productores agresivos que tienen vetada la entrada al teatro Kodak por enviar unos mails pidiendo votos a los académicos amigos. Una lucha de Titanes famélicos que debería resolverse, si el mundo fuese justo, viendo por fin a Tarantino llevarse algo más que el Oscar al mejor guión original que ganó por ‘Pulp Fiction’ en los 90. El único de toda su carrera. Pero esto es Hollywood. ¿Quién pidió justicia?
Eso mismo se preguntará Sandra Bullock si se rompen todas las quinielas y es Meryl Streep -y van….- la que sube a recoger el premio por dar vida a una chillona cocinera en ‘Juliet&Julia’. O Colin Firth si suena la flauta y le roba la estatuilla a Jeff Bridges por hacer de falso suicida. O el mundo entero si no es Christoph Waltz el ganador del mejor actor secundario o Mo’Nique la ídem en la categoría femenina. ¿De verdad puede tener menos emoción la perspectiva?
Por eso nos tememos que a Pe sólo le quede aparecer con Bardem de la mano para robar mucho plano, bonita. Aunque cuando Pedro Almodóvar presente el Oscar a la Mejor Película de Habla no Inglesa seguro que la enfocan una poquita. ¿’La Cinta Blanca‘ o ‘El secreto de sus ojos’? Las dos, para nosotros, son favoritas, aunque ‘Un profeta’ podría dar la sorpresa. Claro que queremos que algún Oscar se venga para España, pero si así tiene que ser, que no sea la coproducción argentina, que ya se lo ha llevado todo, y que lo haga en las manos de Javier Recio García y su corto ‘La Dama y la Muerte’. Necesitamos nuevos Fresnadillos en nuestra vida.
El caso es que James Cameron vuelva o no a ser el rey del mundo, la única certeza es que pasarán las horas y lo que más se comentará por aquí (por España, decimos, no en nuestra web) serán los vestidos de la alfombra roja, los auténticos protagonistas de la velada, puesto que a falta de cisnes colgados del cuello de una china loca bien recibido es todo aquello que muestra el poderío que las épocas de crisis necesitan. ¡Te vamos a echar de menos, Hugh Jackman! ¿Cuál es vuestra quiniela?