‘Caiga Quien Caiga’: el revival en tiempos de crisis

Recuperar cosas que han tenido éxito es el sino de la crisis. A falta de dinero, muchas cadenas de televisión se nutren de programas anteriores que se sabe que -en su momento- dieron dinero y prestigio, en este caso. Es, fundamentalmente, lo que ha hecho Cuatro recuperando ‘Caiga Quien Caiga’, ese programa que, en su era Wyoming, tanto placer nos reportó. Obviamente, el programa ahora tiene una factura mucho más Cuatro y han cambiado algunas cosas del original para adaptarse un poco a la cadena roja.


¿Son suficientes estos cambios para que CQC vuelva a tener éxito? Lo cierto es que, por una parte, sí. Convertir a Gran Wyoming, Juanjo de la Iglesia y Javi Martín (aquel triunvirato que dio fama al programa) en un trío de chicas es algo bastante arriesgado, sobre todo si tenemos en cuenta que suplir a los presentadores originales es cuanto menos imposible. Y más teniendo en cuenta que en la imaginería popular siempre ha sido más un programa hecho por hombres que por mujeres. La elección de la guapísima Ana Milán como conductora, dueña y señora del programa es bastante acertada, aunque le faltan algunas tablas frente a las cámaras (¿cuántas veces puede decir «vale» a lo largo del programa?). Silvia Abril ejerce el papel de graciosilla irónica y Tania Sarrias el de rubia que -de vez en cuando- hace como de medio boba, y muy bien por cierto. El hecho de invitar a un famosillo de reportero invitado (en este caso Paula Vázquez) también es un acierto. Claro, que eso puede que sea gracias a la frescura de la gallega, que con todo su morro le pregunta a Feliciano López sobre su paquete, sin resultar soez del todo. ¿Será capaz de hacer lo mismo Pablo Motos esta semana? Lo dudamos un poco.

Sin embargo, por otra parte, la cosa cojea. Lo grande de CQC eran sus reportajes sobre actualidad política, donde los efectos de post producción eran capaces de hacer soltar carcajadas a los espectadores ante las preguntas más incómodas, aunque el anuncio de Paula Vázquez sobre la vida sana no dejó de ser un sketch divertidísimo y los citados ejemplos siguen presentes como seña de identidad del programa.

‘CQC’ no termina tampoco de ser una producción de chicas del todo, porque hay algunos reporteros masculinos, por lo que pierde un poco la fuerza que tendría haber hecho un programa 100% femenino. Aun así, sigue siendo uno de los pocos espacios en los que se puede llamar «modernillo» a Julio Medem, preguntarle cómo aguanta el tupé o incluso hacer cuestiones absurdas del tipo «¿Te puedo hacer una pregunta?». «Sí». «Mierda, ya te la he hecho».

Lo de incluir una entrevista no termina de cuajar, aunque está bien que en España haya otro programa de entrevistas (aunque sean cortas) además del sonrojante ‘El Hormiguero’. Que los artistas internacionales deben de pensar ya que en España somos idiotas con esas bromas tan absurdas que les hacen todo el rato. Pero de verdad: queridos guionistas de ‘CQC’, necesitamos más ministros en aprietos, como en los viejos tiempos. ¡No es suficiente con un único reportaje de política!

Calificación: 6/10
Destacamos: a Ana Milán, que está arrebatadora.
Te gustará si: Ya sabes si te va a gustar.
Predictor: De momento, su cuota de share (4,6%) no es muy buena. ¿Aguantará?

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Publicado por
Lolo Rodríguez