El resultado es un excelente disco que encaja perfectamente en la discografía de Wilson, y continúa la buena racha tras ‘Smile’ y ‘That Lucky Old Sun’. Y encaja a la perfección porque Brian ha llevado a Gershwin a su terreno, dominado por sus características melodías vocales y ritmos surferos que tanto éxito le han dado. Ya nos damos cuenta de ello una vez que le damos al play y comienza la intro, parte de la ya mencionada ‘Rhapsody In Blue’. Inmediatamente después llega ‘The Like In I Love You’, la primera de las dos nuevas canciones, que deberían convencer hasta al más escéptico del éxito de este «mano a mano», pues supone el perfecto ejemplo de la enorme influencia de un músico sobre otro, y de lo bien que ha sabido el último comprender y asimilar el estilo de su maestro.
Los cuatro siguientes cortes, comenzando con el clásico ‘Summertime’, versionado hasta la saciedad, forman parte de la ópera ‘Porgy and Bess’, de 1935, y si nos dicen que son descartes de ‘Smile’ (especialmente en el caso de ‘I Got Plenty O’Nuttin»), nos lo creeríamos a pies juntillas, por lo magistralmente que están adaptados.
Los temas que hay a continuación se dividen en dos grupos: por un lado tenemos más adaptaciones de composiciones de George e Ira para musicales (como los aires bossa-nova de »S Wonderful’, que pertenece al musical ‘Funny Face’, de 1927, o el standard de jazz ‘I Got Rhythm’, escrito para ‘Girl Crazy’, de 1930), y por otro, la visión de Brian de temas compuestos para películas (como la también clásica ‘They Can’t Take That Away From Me’, de ‘Shall We Dance’ (1937), protagonizada por Fred Astaire y Ginger Rogers o ‘Love Is Here To Stay’, publicada tras su muerte en el film ‘The Goldwyn Follies’ (1938)). El penúltimo corte es ‘Nothing But Love’, la segunda de las canciones terminadas por Brian, y la cual inicialmente iba a entrar en el musical ‘Lady, be good!’, pero acabó archivada hasta ahora, que es cuando se le ha hecho justicia de manera surfera, gracias a Mr Wilson. Una parte más de su personal ‘Rhapsody In Blue’ (por lo dominada que está por los coros) cierra esta auténtica joya. El don para la melodía que posee Brian Wilson ha quedado tan bien plasmado aquí como en cualquier otra de sus grandes obras. 39 minutos de ambrosía sonora.
Calificación: 8,1/10
Lo mejor: absolutamente todas
Te gustará si te gustan: The Beach Boys (cuando Brian mandaba), George Gershwin
Escúchalo: en la web de Brian Wilson