En un intento desesperado por quitar público a iTunes, líder absoluto en ventas digitales en Estados Unidos y cada vez con más protagonismo frente a las copias físicas, la tienda digital de Amazon.com suele vender algunas novedades a 3,99 dólares durante un tiempo limitado. La estrategia permitió por ejemplo a Arcade Fire ser número 1 en Estados Unidos con ‘The Suburbs’. Claro que no sabemos si recaudando mucho o poco dinero.
Sufjan Stevens publicará su nuevo disco, ‘The Age of Adz’, el próximo 12 de octubre. A pesar de que el mundo está entretenido por las maravillas del EP que acaba de editar, ‘All Delighted People’, después de haber escuchado algunas de sus desconcertantes pistas, es uno de los discos más esperados del año.
Amazon ha hecho una petición al sello para poder vender el disco «a un precio muy reducido» y el sello ha dicho que sí pero ha llamado a los fans más dedicados a la reflexión mediante este texto enviado por mail a algunos de ellos:
«Tenemos sentimientos encontrados sobre los precios reducidos. Como hemos dicho, nos encanta llevar buena música a manos de la gente, y cuando el precio es reducido, más gente compra los discos. Un precio bajo llevará a mucha gente a escuchar la música de Sufjan y su maravilloso álbum. Por eso, estamos agradecidos. Pero también sentimos que el trabajo de nuestros artistas vale más que un café con leche. Valoramos el talento, el cariño, el tiempo que ponen en hacer sus discos. Y sentimos que nuestro trabajo, en cuanto a promoción y distribución también es muy valorable y digno.
Por eso personalmente sentimos que los EP’s en formato físico deberían valer unos 7 dólares, los discos largos entre 10 y 12 dólares. Creemos que los EP’s digitales deberían valer unos 5 dólares y los discos largos digitales unos 8 dólares. Así que os estaréis preguntando por qué hemos «dejado» que Amazon venda el nuevo disco de Sufjan por menos que eso. Hay muchas razones, pero sobre todo, porque creemos en ti. Confiamos en ti y en tu habilidad para tomar tu propia decisión».
El sello sacará una pre-copia digital el 28 de septiembre a través de su web y Bandcamp, como ya sucedió con el reciente EP de Sufjan Stevens. Y sin duda, esquiva el asunto del streaming porque no pretende teorizar sobre el futuro de la música: simple y llanamente está llamando a sus seguidores (que muchos sellos indies los tienen y muy fieles) a adquirir esas copias o las físicas y no las de Amazon, al tiempo que confía en que el público medio, al que posiblemente no llegará este comunicado, consuma masivamente la copia de Amazon elevando el disco en las listas de manera considerable.
Asthmatic Kitty, que cuenta en sus filas con gente como My Brightest Diamond, plantea una reflexión parecida a la de algunos sellos españoles que a principios de este año recordaban que no iban por el mundo precisamente en «limusina» ni tenían nada que ver con lo que el pueblo suele entender a la ligera por «industria musical». De nuevo es una pequeña llamada al romanticismo de una discográfica independiente que lucha por que la edición de los discos, bien en formato digital o físico, pueda seguir teniendo algún valor al margen de que el artista quiera salir de gira o no.
Su decisión de ceder a la presión de Amazon puede ser interpretada por alguien como un arma de doble filo, pero también la opinión del que lo critica intentando negar el valor que evidentemente sí tiene grabar en el estudio.