Puede confundir la versión del álbum subida a Spotify, a la que se añaden ‘Greek Style’ y ‘Casio Daisy’. Ambas llaman la atención, la primera por ser graciosa como su nombre y la segunda por contener un sugerente piano. Sin embargo, enturbian un poco el objetivo del disco, que en su planteamiento original comienza y termina con dos temas que se llaman igual: ‘You’. Un mínimo de atención a los títulos de las canciones dan más pistas sobre su contenido. Al margen de la situación geográfica de ‘Same Dream China’, más relevante resulta que una de las canciones se llame ‘Before We Talked’ y tres pistas después aparezca ‘After We Talked’, dejando en medio títulos tan ilustrativos como ‘Marriage’ y ‘I’m With You But I’m Lonely’. Es el sonido de ‘After We Talked’ el de la decepción, la angustia y la soledad, en una segunda mitad con un sabor mucho más amargo de lo que habíamos encontrado en los primeros minutos del álbum.
Quizá ‘Parents’, la acústica que comentábamos grabada con una guitarra en plan lo-fi, pintara algo más después, pero parece que Gold Panda no ha querido destacar especialmente ninguno de los trucos que utiliza, dejando claro tan pronto como en la pista 3 que lo que le importan son las melodías, e incluyendo bonitos guiños indietrónicos cerca de Mùm habitualmente, como sucede en ‘Snow & Taxis’.
El londinense Derwin Panda, de treinta años, ha sabido dotar a su debut de hondura, incorporando sorprendentes elementos como la percusión final de ‘India Lately’ o la máquina de escribir de ‘I’m With You But I’m Lonely’. Independientemente de lo que de verdad haya entrado por su sample, lo importante es que cada uno puede finalmente construir su pequeño mundo alrededor.
Calificación: 7,7/10
Lo mejor: ‘You’, ‘Vanilla Minus’, ‘Snow & Taxis’
Te gustará si te gustan: The Field, Four Tet
Escúchalo: en Spotify