Por fin alguien se ha dado cuenta de la valía de este LP (y de lo sorprendente de que un álbum como este no contase con distribución oficial y solo se vendiese a través de Internet) y es Lovemonk
quien se ha decidido a reeditarlo en CD. Un clarísimo caso de que incluso con la autoedición se puede tener éxito, y una gran noticia para la música independiente en nuestro país, que ve cómo uno de sus estandartes consigue una distribución decente.