El álbum, grabado durante tres días por la propia banda bajo la tutela del productor Rubén Suárez, está formado por siete temas en los que la formación ahonda en la psicodelia sin dejar a un lado la vertiente kraut. Una mezcla interesante de sintetizadores, samples y sitares que pide a gritos levantarse del sillón. Los madrileños presentarán su segundo disco este fin de semana en el Día de la Música Heineken en Madrid. Una oportunidad de lujo para comprobar de primera mano cómo suena lo nuevo de la formación.