¿De quién ha sido la idea de hacer este concierto, vuestra o de la organización de Día de la Música?
Guille: «Los del Día de la Música nos sugirieron que tocáramos en acústico. Estaba gracioso, pero apareció nuestro teclista, Jose, con sus grandes ideas y se le ocurrió que podíamos meter cuerdas porque las canciones estaban quedando demasiado desnudas».
¿Quiénes son los cuatro músicos? ¿Los conocíais de antes?
Guille: «Jose sí los conocía porque tiene muchos contactos. Son cuatro chicos jovencitos. No les he preguntado si antes han tocado con algún otro grupo. Creo que alguna vez sí han hecho algo, pero son de clásica. Estamos cogiendo forma todavía, buscando la textura e intensidad adecuadas. Tenemos que afinar dónde hay que tocar más fuerte, dónde hay una pausa… Como es un acústico, se oye todo muy limpio, así que tiene que sonar todo perfecto».
¿Os han dicho algo de vuestro disco? ¿Les ha gustado?
Guille: «No les he preguntado porque me da cosa» (risas)
Santi: «Al escuchar una, uno ha dicho: «Esta canción me gusta». Creo que ha sido ‘Cerca'».
Os veo muy tranquilos a pesar de que el directo todavía está tomando forma, ¿no estáis nerviosos?
Guille: «Si me preguntas un minuto antes, te diré que todavía no lo veo claro».
Santi: «Tenemos el acústico muy ensayado como parte de la gira y estamos ensayando con personas que son de clásica. Hemos hecho dos ensayos de cada canción y ya funciona».
¿Incluiréis las cuerdas en las canciones antiguas o sólo un par de las nuevas?
Guille: «Sí, tocaremos muchas nuevas y también un par de las antiguas de las «clásicas, añejas», del estilo».
¿Os da miedo que el resultado pueda ser nefasto?
Guille: «A mí me da vértigo. Nefasto no va a ser porque los músicos son solventes y las canciones nos las sabemos, pero sí me da nervio porque nunca hemos hecho nada parecido. No paro de pensar en cómo se va a poner la batería, cómo va a sonar la orquesta, de preguntarme si sonará bien…»
¿Por qué creéis que os han puesto a las cuatro de la tarde?
Santi: «Abrimos el festival después de la mañana y abrimos un escenario. Ponernos a nosotros es una manera de atraer a la gente a esas horas».
Guille: «Además, como nos pidieron que fuera acústico, queda más adecuado».
El disco pedía un concierto así tarde o temprano, ¿no? ¿No era vuestra ilusión llegar a este concierto?
Santi: «Llevamos maquinando cuándo meter este cuarteto mucho tiempo. Era algo que queríamos, porque tocar banda completa con cuarteto podía ser más problemático, pero un acústico y en un día especial era perfecto».
¿No vais entonces con la banda habitual, sólo el cuarteto?
Santi: «Vamos con la banda, que toca con escobillas y cosas así, suave».
¿Repetiréis después en otras ciudades?
Guille: «Pretendemos que sí, que esto sea como un experimento. Si sale bien, repetiremos. Siempre hemos querido hacer lo de las cuerdas, aunque luego dé miedo. Es algo nuevo. Ilusión sí nos hacía y mucha».
Ahora que ya habéis logrado vuestro sueño de hacer un disco con cuerdas, ¿tenéis pensado cómo será el siguiente?
Guille: «Queremos conservar la orquesta y volver un poco a lo electrónico, hacerlo más bailable. Ahora podemos dar la vuelta a la cosa. Es un poco suicidio porque mucha gente dice que la producción del último es buenísima, que es el mejor y lo que vamos a hacer es como una bofetada porque no vamos a repetir una fórmula».
Santi: «Queremos depender más de nosotros, centrarnos más en lo electrónico, nosotros con los cacharritos».
Igual es verdad que es vuestro mejor disco y desde luego nunca en vuestra carrera habíais llenado el Neu!, pero también es verdad que hay gente a la que no le ha gustado tanto el disco. ¿Por qué creéis que es?
Guille: «Probablemente porque le gustaran los primeros. Yo lo analizo mucho, intento pensar por qué funciona algo o por qué no, desde el punto de vista sociológico. Creo en el poder evocador de la música y que hace diez años hay gente que era más feliz. La gente quiere, si algo le gusta, que le den lo mismo todo el rato. Te pongo un ejemplo pueril: si te gusta un coco de una frutería, siempre querrás ir a la misma frutería a por el mismo coco porque está muy rico. Pero a nivel de grupo, a nivel creativo, quieres hacer algo diferente. Nuestros amigos nos decían que la idea de las cuerdas iba a tirar para atrás, pero nosotros decíamos que había que tirar para adelante».
¿Es definitivo que os habéis ido de PIAS?
Guille: «No, estamos en negociaciones. Como todos los sellos, PIAS tiene cosas buenas y cosas malas. Hemos trabajado mucho por este disco, hemos pagado el disco y queremos nuestros derechos frente a grupos a los que les pagan el disco. Estamos en ruinas y quiebras permanentes porque pagamos a todo el mundo, nunca dejamos deudas y creo que se nos debería tratar igual. Estamos en negociaciones y creo que se llegará a buen puerto. Las cosas pacíficas siempre se resuelven. Lo malo es cuando te calientas, mandas los mails, no hay un interlocutor…»
Llegaste a publicar en tu blog que os ibais, ¿ha sido para mejor?
Guille: «Ha sido para mejor porque PIAS se dio cuenta de que yo me puedo quejar, puedo tocar los huevos y de que no podía ser una guerra a ver quién era el más malo. Nos dimos un par de capones mutuos».
Ahora que os lleváis bien, ¿no pensasteis en volver a Subterfuge?
Guille: «No, es una opción que se ha pasado por la cabeza, pero creo que PIAS ha hecho un trabajo con este disco y me da un poco de pena abandonar a medio camino. Porque al final se te quitan las ganas de hacer otro disco. De hecho nos costó mucho recobrar energía para hacer el tercer disco porque estábamos desencantados de cómo funciona la industria. Mejor todos unidos y todos para adelante».
¿Habrá segundo single del disco?
Guille: «Estamos hablando de un vídeo con un director y va a ser ‘Hasta el final’ porque es de las que más está gustando. Tiene mucho gancho, el estribillo, la subida de medio tono medio eurovisiva…»
¿Qué os parecía la idea de presentar esta canción a Eurovisión?
Guille: «A mí me hace gracia la idea, pero creo que Eurovisión ahora mismo no tiene valor ninguno».
Santi: «Este año ha estado en manos de Gestmusic, eso ya lo dice todo. Yo no voy a pasar por el aro de que me digan los de La Trinca qué les vale o qué no les vale».
Guille: «Nos propusieron componer temas para Eurovisión y dijimos que no, por esa misma razón».
En vuestro Twitter pusisteis que ibais a hacer un vídeo que al final no, ¿os referíais a ‘Hasta el final’?
Santi: «Teníamos un proyecto…»
Guille: «Pero yo cuando anuncio en Twitter algo, está muy pensado porque la gente luego te pregunta. Queremos hacer muchas cosas, remezclas, vídeos de remezclas y todo por nosotros mismos con él y yo…»
Santi: «Me hubiera gustado regalar una remezcla por el Día de la Música, pero no ha dado tiempo. Tenemos hechas dos, ‘Lo nuestro’ y ‘Cerca’. La de ‘Lo nuestro’ es un enfoque más electrónico, el tempo es más rápido, el otro día la tocamos en el Ocho y Medio con la base de la remezcla y a la gente le gustó mucho».
A veces volvéis de un concierto y escribís en el blog que el bolo ha sido un desastre. Casi ningún grupo lo hace, ¿por qué creéis que es?
Guille: «Yo y Santi también somos súper autocríticos. Difícilmente nos bajamos del escenario contentos, aunque todo haya ido sobre ruedas. Ves más fallos en ti mismo de los que la gente ve. Yo me oigo cantar, oigo todo desde arriba y sé que hay cosas por mejorar. Eso es malo porque tiendes a atormentarte pero también te hace mejorar. También me da vergüenza ver que un grupo ha tenido un mal día y luego dice en internet: «gracias a todos, fue fantástico». Hay mucha gente que no se da cuenta pero también hay un pequeño sector que sí se da cuenta».
Habéis reconocido en varias entrevistas que ‘Aún no lo sé’, que no es vuestra sino de uno de vuestros músicos, que no encaja mucho en el álbum, ¿qué le ha parecido a él?
Guille: «Es de Javi. No lo sé. Somos muy de que todo el mundo esté contento en la banda. Vino Javi con una canción que tenía en la cabeza, me pareció graciosa y él tenía mucha ilusión».
Santi: «Es un músico de jazz y la canción es rarísima, tiene progresiones atípicas, tensiones armónicas… Como es tan rara, la pusimos de último tema, hace que lo demás tenga más empaque».
Guille: «Como algo freak».
¿Os arrepentís de haberla metido en el disco?
S: «No, está bien. Hacer todo el disco igual…»
Tu canción, ‘Por qué no volvemos’, es la mejor que has cantado, ¿no te parece? En los directos parece que te da la risa como si te sorprendiera que fuera de las más cantadas…
Santi: «En los conciertos igual me río porque soy fatal para las letras en directo y se me olvidan».
¿No te parece la mejor?
Santi: «Bueno, sí, yo creo que es la mejor. Tiene el mejor estribillo junto a la que canté en el segundo disco».
En ‘Mientes’ primero intentabais imitar la voz de Jota con un pedal, pero ya no, ¿y eso?
Guille: «Sí, porque había problemas con el sonido, los técnicos se liaban, la gente no lo oía… Al final es como cantada por mí, como era la original».
¿Por qué creéis que le gusta Ellos a Jota? La prensa le retrata como documentándose siempre sobre flamenco y parece que no le pega.
Guille: «A Jota le gusta todo, últimamente le ha dado por el flamenco, pero siempre está oyendo música, pone temas en aleatorio y salen Psychedelic Furs y luego el Niño de la Capea. Creo que ve en nosotros cierta actitud, le gusta mucho la actitud. También me conoce, cree que somos muy honestos, que no tenemos ambiciones comerciales, que no impostamos cosas que no van con nosotros… Me habla mucho de las canciones, las frases que más le gustan, me hace ilusión porque yo siempre he sido muy fan suyo. Le gusta mucho la letra de ‘Mientes’ porque es muy rabiosa».
Habéis anunciado otro concierto en Madrid en Joy Eslava el 1 de julio pero no se sabe nada, ¿de qué irá?
Guille: «Tocan cuatro grupos, nosotros y tres más. Creo que somos el grupo grande, pero hay mucho secretismo y no sé quiénes son los demás».
Para ser un grupo de pop nacional, no os leo mucho hablando de pop nacional, ¿cuáles son vuestros grupos favoritos ahora mismo?
Guille: «Me gustan mucho los Triángulo, al principio me daban igual, pero a base de verlos en directo, del volumen que se ponen en los amplis… creo que son mi grupo favorito actual. He oído el nuevo disco de Anntona, que tiene la cabeza llena de ideas y diría esos dos, Triángulo y Anntona. Me gustan los grupos indies cuando tiran hacia el rock, quizá por la actitud. El pop de chicle son buenas canciones, pero me parece que tienen una actitud impostada o cojean por algún lado, como si se pusieran una careta o un disfraz. Me parece poco honesto. Por eso me gustan los Triángulo, me parece como real, tocan así porque son así».
Santi: «Yo es que cada vez soy más carca y escucho cosas más antiguas. Últimamente oigo Frankie Avalon, del año de la pera. Lori Meyers, a raíz de aprender sus temas por lo de la Orquesta Poligonera, me han terminado gustando. Me gustan los grupos españoles de siempre tipo Los Planetas. Estoy muy out».
Os ha salido otro bolo con La Orquesta Poligonera, en el Sonorama, ¿verdad?
Guille: «Sí, porque nos lo pasamos muy bien. No hay pretensión ninguna. Nos gusta divertirnos, no hay ánimo de lucro. La condición es pagarnos los gastos y vamos como si fuera al colegio, tocando canciones que te gustan».
Santi: «Fue muy bonito cuando nos juntamos. Coque Malla, que podría estar tocando por mucho dinero, estaba tocando la guitarra en un rincón interesado en que sonara todo bien, como que le gustaba, es una actitud…»
Guille: «Sí es una actitud, porque hemos tocado con gente de mal humor, que ves que no les apetece».
¿Hay alguien que no tocara en Sonorama ya que vaya a ir expresamente a tocar con la Orquesta?
Guille: «Creo que Anni, ¿o toca en el Sonorama? No lo sé, por ejemplo Nicolás Pastoriza, de un grupo noventas, gallego, que se llamaba La Marabunta, es el mayor y nos cuenta cosas de abuelo cebolleta que están muy bien. Él va sólo para ese concierto».