¿Se puede hacer un concierto imprescindible con poco más que dos EPs? Con el hype de Florrie a pleno rendimiento, y pegando fuerte en todos los medios especializados, parecía un sacrilegio perdernos la actuación de la que en su momento fuera adquisición de la prestigiosa factoría Xenomanía. La sala Ramdall fue el lugar escogido para este concierto, ante una reducida audiencia, que incluso muchos llegaron a comparar con «aquella vez que Lady Gaga vino y tocó en el Ochoymedio», salvando mucho las distancias, claro, porque Florrie (por desgracia) no parece estar llamada a un éxito tan absoluto como el de la estadounidense.
Ataviada con unos shorts que dejaban al descubierto sus kilométricas piernas y que hicieron sufrir vértigo a más de uno, Florence Arnold se subió al escenario dispuesta a demostrar que no es solo una cara guapa (guapísima, nos gustaría añadir), sino que se vale por sí misma.
Tanto es así, que además de mostrar que es capaz de animar al público constantemente, la británica también optó por tocar algunos instrumentos (ella en realidad es batería). En ‘Panic Attack’ fue la percusión (a la que recurrió en multitud de ocasiones durante el show), pero en la celebradísima ‘Left Too Late’ fue la guitarra. Y así, una a una, se fueron sucediendo todas las grandes canciones de Florrie: ‘Begging Me’, ‘Summer Nights’, ‘Experimenting With Rugs’ o la absolutamente espídica ‘Speed Of Light’, dejando bien claro que está llamada a convertirse en la nueva diva del indie, muy por encima de Kylies, Madonnas o Rihannas. 7
Florrie actúa hoy día 18 en Bilbao y mañana lo hará en Barcelona, en la Sala Razzmatazz.