Una producción exquisita y meticulosa con los detalles (la batería suena mejor que nunca), pero a la vez con el empuje necesario, y un conjunto de temas directos y divertidos son indicios más que suficientes para llegar a la temprana conclusión de que ‘El Camino’ podría fácilmente ser el disco más completo y con mayor personalidad de la banda. El blues rock sigue funcionando como núcleo, pero cada vez más lejos del minimalismo guitarra-batería-voz de sus comienzos y con una instrumentación más rica, a destacar las dosis justas de órgano, sintetizador y metalófono en los momentos precisos, además de la profusión de coros que ya veníamos escuchando anteriormente.
Tanto el primer single, ‘Lonely Boy’, como ‘Dead And Gone’, ‘Run Right Back’ o ‘Sister’, de ritmo trotón y energía desbordante, podrían formar parte de una road movie a lo Tarantino, aunque tal vez fuera demasiado riesgo para el supuesto director, ya que de tan pegadizos y efectivos que son, estos temas podrían quedar muy por encima del guión. El único momento de calma lo encontramos en el comienzo acústico de la ledzeppeliniana ‘Little Black Submarines’, que hacia la mitad se transforma en una coda rockera, solo de guitarra inclusive. Su influencia primaria queda claro que es la base de todo, pero en canciones como ‘Nova Baby’ o ‘Stop Stop’, es la más reciente la que destaca. Para ser dos chicos blancos, Auerbach y Carney fusionan a la perfección tres pilares de la música afroamericana en un disco en que encontramos trazos de clase y genialidad por doquier y al que, por tanto, no le sobra ni un segundo.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Little Black Submarines’, ‘Gold On The Ceiling’, ‘Lonely Boy’, ‘Dead And Gone’, ‘Run Right Back’, ‘Sister’, ‘Hell Of A Season’…
Te gustará si te gustan: The White Stripes, The Dead Weather, Black Rebel Motorcycle Club
Escúchalo: no se puede