El vídeo está obviamente dirigido por Jamie Hewlett y es uno de los trabajos más costumbristas que hemos conocido de Gorillaz, con sus personajes habituales convertidos en una panda de vagos. ¿Alguien recuerda aquel día que dijeron en la radio en los 90 que Damon Albarn no se cambiaba de calzoncillos hasta que estos podían quedarse pegados en una pared? Seguro que era una broma o la fuente, un tabloide, pero igual Jamie también lo oyó.