El programa enfrenta a dos grupos de famosos en una suerte de karaoke interminable en el que la mejor canción en castellano del repertorio es ‘Soy un gnomo’. Concursan Josema Yuste, muy aficionado a estos formatillos; la pobre Elena Furiase, a la que ya han obligado a hacer un popurrí-popurrí de los Flores; y el ganador de ‘El número 1’, al que no han dejado lucirse casi nada, entre otros.
Carmen Lomana, a quien ya confundo con Toya -no Jackson, sino la de ‘Quién quiere casarse con mi hijo’-, sólo se ha lucido reivindicando a grupos más propios de perroflauta, como Macaco o Fito y los Fitipaldis. Cantando, se ha mantenido impertérrita, sin fingir en ningún momento que aquello le importaba algo, con todos los músculos de la cara completamente inmóviles mientras se suponía que tenía que interpretar, y ante todo sin dar ni una. Lo mejor, como siempre, estaba en Twitter
. «Ya os advertí que soy peor que un perro afónico», decía a eso de las once de la noche. Una grande.‘Dando la nota’ es una muestra de la televisión más casposa que asola Europa (no sólo España), donde ni siquiera compensan los contados momentos kitsch, como ese en el que Cali y El Dandee han batido el récord Guiness de autotune en dos de sus singles, mientras un rótulo en pantallas insistía: «voz en directo». Lo peor es que en teoría el ganador de todo esto dona 3000 euros a una ONG. ¿Así pretenden justificarse? No es suficiente, no es suficiente…
Calificación: 0/10
Destacamos: a Carmen Lomana, pero con el sonido quitado
Te gustará si te gusta: sufrir
Predictor: Hará una audiencia negativa, lo retirarán y Antena 3 pedirá perdón en una rueda de prensa