Poco a poco y disco tras disco, especialmente en tus dos últimos lanzamientos, has ido alejándote del sonido lo-fi en favor de una mayor nitidez. ¿Ha sido una consecuencia del paso del tiempo, de madurar como artista o ha sucedido simplemente porque sí?
“Creo que depende de dónde se graben las canciones. Tengo un montón de grabaciones caseras y si las comparas con una grabación de estudio, evidentemente hay una diferencia. Es lo normal, al principio lo grababa todo en casa y luego he acabado haciéndolo en un estudio. Ha sido una progresión normal”.
Ese mismo paso del tiempo también ha provocado que tanto tus canciones como tu manera de cantar se hayan vuelto más dulces, más ensoñadoras. ¿Crees que ha sido otra consecuencia?
“No estoy muy seguro de qué quieres decir con «consecuencia», pero sí, todo ha tendido a calmarse más, a volverse más dulce. Eso sí, también me gusta sonar más rockero a veces; me gusta la idea de rocanrolear. Veremos qué pasa en el siguiente disco, si suena más rock o no, no le doy demasiadas vueltas. De todos modos no pienso en las consecuencias de nada”.
Como bien acabas de decir, también te gusta pisar la distorsión en algún tema. Pensando en artistas que podían (y pueden) pasar de la calma acústica a la agresividad y el ruido, viene a la cabeza el nombre de Neil Young. ¿Te ha influido su manera de hacer las cosas de algún modo?
“Claro, Neil Young siempre ha sido una influencia enorme y creo que lo ha sido para muchos otros. A todo el mundo le gusta un buen riff”.
Gracias al éxito de ‘Smoke Ring For My Halo’ y las estupendas críticas que ha recibido, parece que por fín te estás dando a conocer ante un público más amplio. Suponiendo que tienes nuevas canciones y otras en proceso de composición, ¿sientes algún tipo de presión para tu próximo lanzamiento?
“No, no siento ninguna presión. He empezado ya a grabar el disco, antes de que comenzase la gira de verano y todo pinta bien. Cuando terminen los conciertos pretendo volver al estudio y emplear otros dos meses para trabajar en él. Si hay algún tipo de presión, desde luego no es en un sentido negativo y en todo caso me la impondría yo para dar lo mejor de mí mismo”.
Por cierto, ¿cómo te sentiste al ver que medios como NME o Rolling Stone elegían ‘Smoke Ring’ como uno de los mejores del año?
“Fue guay, estuve alucinando con ello durante un tiempo. Me ha hecho sentirme seguro de lo que hago y no es que no confíe en mi música, porque si no hubiesen ido las cosas así de bien yo habría seguido adelante, pero no cabe duda de que me ha ayudado a continuar con ganas”.
Desde 2008 has estado sacando EP’s y álbumes cada año, hasta llegaste a sacar dos LP’s en 2009. En cambio, no ha salido nada nuevo en lo que llevamos de 2012. ¿Cuál es la razón?
¿No crees que, teniendo en cuenta el tipo de música que tocas, llamar a tu grupo The Violators puede confundir a aquellos que no la conozcan?
“Bueno, la idea de llamar el grupo así fue en plan de broma, algo cómico. Sobre todo tiene sentido habernos llamado así por la primera referencia con el nombre de Kurt Vile and The Violators, que fue el EP ‘Hunchback’, con un sonido mucho más punk de lo habitual. Encajaba con el tipo de música que hicimos. No me importa si puede llegar a confundir o no, desde luego no confundirá a la gente que conoce lo que hago. Mi propio nombre, que es real, puede llegar a confundir también, ya puestos”.
¿Qué opinas del cartel del FIB? ¿Hay algún grupo en particular que te apetezca ver?
“Pues sí, me apetece ver a De La Soul. Últimamente he estado escuchando bastante hip hop, también a otras bandas como The Roots, que también son de Filadelfia y por ello me he sentido unido a su música”.
¿A qué grupos has estado escuchando últimamente que nos puedas recomendar?
“Uno de los discos recientes que más me ha gustado es el nuevo de Beachwood Sparks (NdE: ‘The Tarnished Gold’), que ha salido con Sub Pop. Me encanta su country cósmico en la onda de The Byrds. Psicodelia moderna. Otro de mis grupos favoritos son tUnE-yArDs, a quienes vi hace poco en el Sasquatch! (NdE: festival que se celebra anualmente en George, Washington) y son increíbles”.
En según qué críticas se te ha comparado con artistas como Bruce Springsteen. ¿Estás de acuerdo con la comparación? ¿Ves el enlace que os une?
“Soy un coleccionista obsesivo de artistas como Bruce. He seguido su carrera de cabo a rabo, tengo todos sus álbumes. También conozco muy bien a otros como Neil Young o Bob Dylan, pero eso no quiere decir que mi música sea exactamente fiel a sus estilos. Desde luego que hay un poco de cada uno en una canción u otra, pero a la gente le gusta decir esas cosas, dicen muchas cosas. Por otro lado no se habla de otras influencias como el folk británico y artistas como Bert Jansch o John Martyn. Cada crítico tiene su opinión».
¿Y te ves dando un concierto de cuatro horas cuando tengas alrededor de los sesenta, como hizo Bruce recientemente en Madrid?
“Él es el ‘Boss’, él puede hacerlo. A mí no me importaría dar un concierto así, pero no se si aguantaría cuatro horas y menos a esa edad (risas)”.
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