Tres miembros de Pussy Riot han sido condenadas a dos años de cárcel por adentrarse en una iglesia para hacer una de sus performances contra Putin, pero hay más miembros en la banda. Según ha informado el propio grupo a través de Twitter, dos de ellas han conseguido escapar de Rusia porque las autoridades las están buscando y ahora podrán seguir «reclutando artistas femenistas para continuar con las protestas», según informa The Guardian
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En las últimas horas, Björk ha sacado unas camisetas para apoyar económicamente la causa Pussy Riot.