‘Babel’ es incluso más épico que el primer álbum, ya desde el contundente principio con ‘Babel’, ‘Whispers In The Dark’ y ‘I Will Wait‘, el primer single, que muestra claramente por dónde van a ir los derroteros. La mezcla del acento inglés de Marcus Mumford con el banjo y armonías vocales propias del country extraña un poco al principio, pero enseguida el ruido de las fanfarrias y los coros grandiosos supera a todo lo demás (‘Lover’s Eyes’, ‘Below My Feet’, ‘Lover Of The Light’) y lo arrastra a su paso en canciones que van lanzándose hacia delante como torrentes. La producción de Markus Dravs es idónea para esta exaltación de las emociones. Incluso en los momentos, digamos, más íntimos -si es que los hay, porque todo aquí suena más grande que la vida- se intuye el lanzamiento hacia lejanos horizontes; véase ‘Reminder’ o ‘Ghosts That We Knew’.
Pero la tónica general es sin duda la del exceso épico. Eso hace que ‘Babel’ acabe siendo un ejercicio plano comparado con el de otras estrellas contemporáneas del folk, con una paleta emocional mucho más variada y llena de claroscuros. El banjo y los juegos vocales le dan un toque de originalidad, la producción es excelente -para lo que busca, eso sí: no vas a encontrar nada inesperado en los doce cortes del disco, quince si se trata de la edición especial, que incluye una versión de ‘The Boxer’ de Simon And Garfunkel- y cada canción funciona por separado, pero el conjunto se vuelve previsible y de posibilidades reducidas.
Calificación: 6/10
Lo mejor: ‘I Will Wait’, ‘Lover Of The Light’, ‘Lover’s Eyes’
Te gustará si te gustan: Band of Horses, Arcade Fire, The War On Drugs, Biffy Clyro, Coldplay
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