AC Newman / Shut Down the Streets

Atentos, porque Allan Carl Newman ha grabado uno de los discos más bonitos de este 2012. Pero bonito no desde los alucinógenos sonidos que marca la moda de esta temporada, y que muchas veces esconden una intrascendencia dañina, sino desde la sencillez y el trabajo de orfebre de unas melodías delicadas, de unos arreglos cuidados al máximo, de unas armonías que no buscan quedarse en lo obvio sino aportar su granito de arena. La belleza de artesanos del pop como Carole King, Todd Rundgren o Stuart Murdoch.

La carrera en solitario del fundador de The New Pornographers se diferencia de la del supergrupo canadiense en que es mucho más íntima e introvertida. Sin embargo, hasta este tercer disco, Newman no se había atrevido a profundizar en sus propias experiencias vitales. Quizá es por eso que ‘Shut Down The Streets’ parece situarse por encima de ‘The Slow Wonder’ (2004) y ‘Get Guilty’ (2009). No es que estos álbumes sean peores, pero da la sensación de que les falta un punto de coherencia interna comparados con él. Eso en el interior. En la superficie, ‘Shut Down The Streets’, como no podía ser de otra manera al tratarse de una introspección autobiográfica, adquiere unos tintes más ocres, otoñales, con una nostalgia que nunca llega a empañar la claridad cristalina de los temas. Ya sea aconsejando a su hijo en ‘There’s Money In New Wave’ o hablando de la muerte de su madre en ‘They Should Have Shut Down The Streets’, Newman se mantiene en el difícil equilibrio de los clásicos, sin caer en el patetismo o la autocomplacencia, dos cosas de las que pretendía huir, como ha asegurado en entrevistas promocionales.

A pesar de alejarse del grupo que le ha dado fama, los fans de The New Pornographers pueden estar tranquilos porque también hay temas que recuerdan bastante a ellos, como ‘Encyclopedia of Classic Takedowns’, ‘Hostages’ o el estribillo de ‘Wasted English’. Además, Neko Case participa haciendo coros. Pero ‘Shut Down The Streets’ es más relajado, más campestre incluso, quizá por el toque del banjo y el violín de ‘The Trobadour’. Sería un buen paradigma de una hipotética etiqueta de AOP («adult oriented pop»). Hasta el momento en que la inventen, si es que el pop puede ser en algún momento adulto y perder su espíritu de ingenuidad, nos quedaremos con esta bonita colección de canciones. Bonita en el mejor sentido de la palabra.

Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘I’m not Talking’, ‘Encyclopedia of Clasic Takedowns’, ‘The Trobadour’
Te gustará si te gustan: The New Pornographers, Apples In Stereo, The Shins, los Wilco de ‘Sky Blue Sky’, Elvis Costello
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