Se desconoce su identidad, pero se cree que trabaja en algo relacionado con la industria. Sony argumenta que esta persona dañó su estrategia promocional y las ventas del álbum e incluso argumentan que la filtración estropeó su relación con Beyoncé y su reputación como artista. La filtración del disco se produjo el 8 de junio, mientras que no salía a la venta hasta el día 24 de aquel mes. El artículo enlazado de Torrentfreak reflexiona sobre cómo calcular el perjuicio de una filtración así, aunque sin llegar a ningún dato demasiado concluyente.