Y sí, Carmen Maura estará el próximo mes de septiembre en la 61 edición de este festival para presentar fuera de concurso ‘Las brujas de Zugarramundi’, la nueva película de Álex de la Iglesia que se estrena el 27 de septiembre, pero no hacía falta esta excusa para que le concedieran de una vez tan merecido premio.
Y es que este galardón, que se entrega en reconocimiento a toda una carrera, pocas veces ha estado tan justificado como en el caso de Carmen Maura, que se convierte así en la primera actriz española que recibe el Donostia. No es para menos teniendo en cuenta que hablamos de la mujer que, para desgracia de ambos y suerte para nosotros como espectadores, mejor ha entendido a Pedro Almodóvar. La Pepa de ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’, la Gloria de ‘Qué he hecho yo para merecer esto’ y en general cualquier personaje parido bajo las órdenes del manchego, no sería imaginable sin ella.
Eso es algo que supo captar Álex de la Iglesia, que en ‘La comunidad’ recuperó a una Carmen que parecía condenada al olvido después de demostrar que sin Pedro podía hacer cosas como ‘¡Ay, Carmela!’. Televisión, teatro y cine francés han sido sus refugios siempre que el cine le ha dado la espalda o, simplemente, no encontraba papeles para ella. Una vía de escape que podría ser la explicación de por qué es una intérprete que nunca tiene pelos en la lengua, así que seguro que en su discurso de aceptación nos dejará frases, y puyas, para la historia. ¿Tenderá la mano o se pondrá guerrera? Sea lo que sea, enhorabuena.
Recordamos su labor con una secuencia que todos los veranos nos viene a la cabeza. Sí, ésa.