La visita del dúo franco-alemán afincado en Kreuzberg sirve, en cualquier caso, para dar a conocer este ‘Cactus versus Brezel’ que presentaban como una producción analógica grabada en Los Ángeles, «careciendo de toque profesional en la producción y empaquetada con errores humanos que normalmente serían editados por nuestros ordenadores». Más allá de coartadas conceptuales, el álbum presenta a los Stereo Total de siempre, cuyo sonido se intuye desde los propios títulos de canciones como ‘J’aime Le Synthetique’, la gamberra ‘Nympho-Maniaque’ o ‘LA, CA, USA’, un claro homenaje a las tierras donde se grabó el disco. Continúan también las referencias sesenteras en ‘Pixelize Me’ o ‘Qu’est-ce que tu veux’, los toques electro a lo Moroder en ‘Die Frau in der Musik’ o el rock en ‘Le ridicule ne tue plus’.
Entre las sorpresas, el thriller con cuerdas de ‘Cafeteria Ideale’ (‘Ich will Blut sehen’ también suena inquietante, y no sólo por su letra sangrienta y sedienta de venganza), en contraste con ‘Ein Lied für Vegetarier’, que se queda a las puertas de ser un tema infantil educativo presentando las verduras. ‘Cactus versus Brezel’ no es un antes y un después en la carrera del grupo ni un álbum tan certero como ‘Musique automatique’, pero desde que arranca con ‘Jaloux de mon succés’, con todos esos «Oscar alineados en la chimenea» y todos esos «discos de oro», hasta que se cierra con un tema tan épico y contradictorio como ‘We Don’t Wanna Dance’, podemos ir comprobando que el grupo mantiene intactos su frescura, su acidez, su poder para el entretenimiento y su originalidad. Por lo visto nos habíamos olvidado: un hurra para ellos y un cero para nosotros.
Calificación: 6,9/10
Lo mejor: ‘We Don’t Wanna Dance’, ‘Diese Musik Hört Sich An’, ‘Pixelize Me’
Te gustará si: te gustan los anteriores, una mezcla de chanson, con electro y rock
Escúchalo: Deezer