‘Pythons’, que ha sido producido por Gil Norton (Pixies, Echo & The Bunnymen, Foo Fighters) viene presentado por ‘Demon Dance’, efectivamente una canción muy Weezer, como lo es también ‘Blair Witch’, que tiene uno de esos estribillos contundentes propios de la banda angelina. “Necesito amor más que nadie”, lamenta John Paul Pitts, líder de Surfer Blood, y lo mejor de su voz es que posee una sorprendente calidad interpretativa. ¿La mejor canción del disco? Quizás los seguidores de Guided by Voices se queden con ‘Gravity’, mientras que los fans de ‘Astro Coast’ encontrarán un punto de conexión con aquel tanto en los gritos de ‘Weird Shapes’ como en el ligero puntito tropical de ‘Needles and Pins’, que les encantará, pero melódicamente la joya de ‘Pythons’ no es otra que ‘Say Yes To Me’, todo un caramelo.
Al haberse acercado, sin embargo, a estructuras de canción más convencionales, y aún sin abandonar su habilidad para escribir melodías pegadizas o hacer rugir sus guitarras con prometedora maestría (la corpulencia de ‘Slow Six’ deja boquiabierto), la banda ha perdido algo de su espontaneidad inicial. ¿Habrá tenido algo que ver su fichaje por Warner? La predictibilidad que caracteriza ‘Pythons’ inclina la balanza hacia el sí. Aunque es absurdo negar la calidad de temas como la bonita ‘Prom Song’ o ‘Weird Shapes’ y ‘Say Yes To Me’, dos pequeños clásicos, amén del mejor par de muestras del talento musical del que Surfer Blood presumen en este disco que de manera tan estupenda, que no personal, logra capturar esa nostalgia noventera del mejor rock universitario actual y pasado. Para devorarlo este verano.
Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Weird Shapes’, ‘Say Yes To Me’, ‘Slow Six’, ‘Prom Song’
Te gustará si te gusta: Built to Spill, Guided by Voices, Weezer
Escúchalo: Deezer