«Lo más adecuado sería encadenarles con alambre de espino a los subwoofers en pleno concierto (sus gritos ya dejarán de oírse) y simplemente esperar a que James Blake haga el resto. ‘Voyeur’ puede ser el tema adecuado en el cual esos graves tan adorables de James hagan retumbar el pecho de estos indeseables».
«Les invitaría a una copa, les diría que son muy guapos y me los llevaría a casa… para luego coserlos y rodar la última parte de ‘The Human Centipede'».
«Cogería al parlanchín y le pondría el ojete justo donde debería ir la caja en la batería durante el tema ‘CMYK’. Después de la canción, la próxima vez se pensaría 2 veces hablar mientras suenan esos bajos que hacen que me vibren las aletillas de la nariz».