«Salvador nos invitó a Francis Ford Coppola, Sonny y a mí a una cena. Primero fuimos a un apartamento. En el cuarto de al lado estaban haciendo una orgía. Los invitados iban en diferentes grados de desnudez. Estaban a sus cosas y hablando francés. Todo muy alocado. Tenía las manos apoyadas en la silla y vi algo en un hueco». Cher cuenta que encontró un pez de goma con una colita que se movía hacia adelante y hacia atrás. La cantante creyó que el juguete de niño era muy gracioso, cuando Dalí le explicó que «era maravilloso cuando te lo colocabas en el clítoris». Por alguna razón, Cher decidió no quedarse el regalo.
Finalmente cuenta que Sonny y Francis, «incapaces de controlarse», se pusieron a comer chocolates de la mesa, sin saber que Dalí los había hecho como decoración, mientras Ultra Violet -asistente y musa de Dalí- acosaba a la intérprete de ‘Believe’ con su bastón. «Pensé: «le voy a partir el bastón a esta puta en la cabeza». Al final de la velada, en un restaurante Salvador y Ultra Violet se cambiaron de mesa y Cher y los suyos terminaron por su cuenta.