The Hidden Cameras / Age

The Hidden Cameras comienzan su nuevo disco en francés, con casi idéntica frase con que se cierra uno de los hits del celebrado último disco de Stromae: «Men: tous les même» (los hombres sois todos iguales). El belga canta desde un punto de vista irónico, divertido, jugando con su propia ambigüedad sexual. El proyecto del canadiense asentado en Berlín Joel Gibb lo hace para introducir un álbum en gran parte cubierto por un manto de oscuridad. Si ya el single ‘Gay Goth Scene‘ hablaba del bullying -quedaba muy claro en su loable videoclip- utilizando sonidos precisamente góticos, esta misma canción de apertura para ‘Age’, ‘Skin & Leather’, suena bastante siniestra a través de sus cuerdas, percusiones y letra, con alguna que otra referencia sadomasoquista («una lengüetazo al suelo es el final de todo»).

Hace cinco años, cuando publicaban el que era hasta ahora su último disco, ‘Origin:Orphan‘, la falta de ideas para lograr la majestuosidad del que podríamos considerar su debut, ‘The Smell of Our Own‘, un disco folkie de 10, era el principal pero. La pregunta ahora es si, tras el curioso EP vs Hidrogenesse, el giro estilístico es el adecuado. Las intenciones sintéticas son constantes y este es el disco más electrónico de Hidden Cameras, pero incluso teniéndolo en cuenta, ‘Age’ es disperso en tanto que no se concentra en un estilo particular. La línea oscura no tiene del todo continuidad y entre sus ocho canciones encontramos cosas tan diferentes como el torpe dub de ‘Afterparty’ o el acertado número electro de ‘Carpe Jugular’, que recuerda a Gary Numan, Depeche Mode o Yazoo y contiene algún guiño apto para los seguidores de Italians Do It Better.

Aunque parezca increíble, es una pena que el disco no haya seguido esa línea (apenas lo hacen los dos minutos de ‘Ordinary Over You’), porque Joel Gibb como vocalista icónico podría tener su futuro en el género, y en realidad el disco termina volviendo a su punto de partida en la final ‘Year of the Spawn’, por otro lado capaz de recordarnos el buen uso de las cuerdas que es capaz de hacer Joel con una buena melodía (el piano en este corte está tocado por Chilly Gonzales). En este punto no ha quedado muy claro qué plantea ‘Age’, aunque quizá su única idea sea la de transmitir como sea la desesperación a la que somos conducidos en este mundo (en relación con el título del disco). El caso de la transexual Chelsea Manning ha sido una fuente de inspiración y ‘Doom’ incluye frases tan ilustrativas como: «Esperamos complacer a los hombres / nos cambiamos los nombres / pero no sabemos el significado de nuestros propios errores», «nos engañamos a nosotros mismos al pensar que esto es la felicidad» o «tenemos cuentas que pagar y fiestas a las que asistir, pero todo lo que hacemos es inhalar la suciedad y tirarnos un pedo».

Calificación: 5,8/10
Lo mejor: ‘Year of the Spawn’, ‘Doom’, ‘Carpe Jugular’
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Escúchalo: Pitchfork

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Publicado por
Sebas E. Alonso