‘Brain Cells’ fue una sorpresa como single. Suena como una de las canciones más interesantes de vuestra carrera. ¿Os inspirasteis en algo en particular para su sonido oscuro?
Vino de nuestro guitarrista, Duncan, que quería intentar escribir una canción usando un moog y una caja de ritmos en lugar de una guitarra. Creo que está inspirada en parte en Fever Ray y The Knife.
¿Y ‘Leave this Island’ ¿Podrían estar Giorgio Moroder o las bandas sonoras de los 80 detrás de sus sintes?
Lukas, nuestro teclista, escribió la música para esa canción, y sí, ten por seguro que es fan de Moroder, pero la canción empezó siendo una balada al piano. Fue después de que la adaptamos a la parte vocal relativamente suave de Paul cuando usamos sintetizadores y samples de batería y el tema tomó un sentido más electro.
Hay un par de canciones electrónicas, pero todo el disco no es entero así. ¿Es porque está dividido de alguna manera entre las canciones que primero iban a ir en un EP aparte y las que escribisteis luego cuando decidisteis que sacaríais un álbum y no un EP?
No, las canciones que en principio iban a ir en el EP eran tan variadas como el álbum ha terminado siendo. La variedad viene de tener una mentalidad más abierta y de trabajar sin un productor.
¿Es una presión escribir canciones de rock porque es lo que vuestros fans esperan del directo? ¿Son esas canciones más rockeras las que disfrutáis más tocando, con las que estáis más a gusto?
Si hay algún tipo de presión al escribir, tiene más que ver con cómo cambiar tu sonido que con sacar algo de un estilo familiar, que sería lo más fácil pero mucho menos satisfactorio. Creo que nuestro público está creciendo con nosotros y está bastante contento de escuchar que intentamos hacer cosas nuevas.
La guitarra de ‘Lydia, the ink will never dry’ suena un poco a Johnny Marr. Incluso nombrar una persona en el título suena a Morrissey. ¿Estáis de acuerdo? ¿Es algo consciente o en absoluto?
Hasta cierto punto. Dunc es fan del tipo de guitarra que repiquetea a lo Peter Buck y Johnny Marr.
Habéis producido este disco vosotros mismos, pero ¿cuáles son las ideas aportadas por Field Music?
Dave Brewis se encargó del arreglo de batería de ‘Leave This Island’ y Peter terminó tocando la parte de la marimba en ‘Lydia, The Ink Will Never Dry’. Pero creo que la originalidad de su música nos inspira de una manera general, así que trabajar con ellos fue muy excitante.
En realidad, ¿cuándo los conocisteis? ¿Algún álbum en particular o de sus proyectos paralelos que os guste especialmente? ¿Están bastante infravalorados, verdad?
Nos hemos conocido durante años, desde antes de Field Music, cuando Dave estaba en New Tellers y Peter en Electronic Eye Machine, donde yo toqué durante un tiempo la batería. Siempre han sido importantes para cualquiera que estuviera relacionado con la música en la parte noreste de la escena musical. Y sí, están infravalorados por todo el mundo (excepto por Marc Riley).
¿Y Dave Okumu, nunca fue una opción co-producir el disco con él?
Sí se habló y podría haber pasado si hubiéramos pensado en él algo antes. Este tipo de colaboraciones dependen de que haya suerte con el calendario de cada uno, más que de cualquier otra cosa. Pero en definitiva, estoy orgulloso de que insistiéramos en producir el disco nosotros mismos. Ha sido una inyección de confianza para nosotros.
Viendo todas las portadas de vuestros discos juntas, salta a la vista que son muy fáciles de diferenciar. No pasa precisamente con cada banda. ¿Hacer portadas extra carismáticas es algo que os inquiete especialmente?
Sí, por supuesto. Es una parte muy importante de nuestra identidad y siempre queremos que las portadas sean bonitas y atrevidas.
En toda vuestra discografía, hay poquísimas canciones que pasen de 4 minutos. De hecho, las dos de este nuevo disco que pasan duran 4:01 y 4:06. ¿Significa «corto» (y un poco también «rápido») algo bueno para vosotros?
Corto, probablemente. Rápido, definitivamente no. Al principio, teníamos una especie de política de nada de solos y la mayoría de las canciones eran rápidas y tensas. En los discos siguientes (especialmente en este) hemos cambiado más los tempos. No es ningún secreto que es más duro tocar correctamente en los tempos más lentos y supongo que nuestra habilidad para hacerlo ha mejorado con el paso de los años. Pero sí, todavía mantenemos arreglos algo austeros en las canciones. Quizá tiene que ver con el hecho de que no tenemos un músico líder, somos un poco combo. Tal vez lleguemos a los cinco minutos en nuestro siguiente disco.
Últimamente, parece que no ha habido tantas bandas de rock como durante los primeros años de la pasada década. O son rockeras de un modo diferente (Savages, Two Door Cinema Club). Cuando os interesáis por nueva música a día de hoy, ¿os interesan más los grupos de rock u otros tipos de música?
Todo lo posible por lo que respecta a nosotros, como siempre. Siempre ha habido nuevas bandas que merecen más reconocimiento pero si lo logran, no siempre necesariamente sirve de mucho, creativamente hablando.
¿Creéis que el bombín de Paul Smith se ha convertido en una especie de símbolo? ¿Qué porcentaje de su personalidad contiene?
Esta es una pregunta muy tonta.
¿Cuán importante para vosotros es la diéresis de Maxïmo Park? ¿Cuánto os enfadáis cuando vuestro nombre aparece mal escrito?
Esta también.
Foto: Steve Gullick.