Bel Bee Bee / Still Unstirred

Hay una nueva generación de artistas españoles ajena por supuesto a la música que triunfa en las radios, pero también a la que parece a medida para sonar de manera masiva en los festivales independientes de moda. Bflecha, John Gray, Desert o Bel Bee Bee no se parecen en nada a Los Planetas, ni a los Ramones, ni a Joy Division, ni a Vetusta Morla. Claramente están más influidos por la línea editorial de sites como Disco Naiveté o Gorilla vs Bear y cada uno, de una manera o de otra, trata de definir su estilo en medio de referencias como -dependiendo del caso- M.I.A., Rhye, Lana del Rey, Beach House, S O H N, London Grammar, Drake, AlunaGeorge, etcétera.

¿Qué aporta el proyecto de Bel Bee Bee a los nombres que ella misma cita, como Bon Iver, Kate Bush, James Blake, Mogwai, M83, Woodkid? El principal es una bonita voz más cercana a la tradición gorgorito en la línea de Sinéad O’Connor que a las más frías y calculadas que acostumbra el underground, pero utilizada como un instrumento más. A pesar de algún momento aislado como esa cumbre en ‘Golden Road’, de lo doblada que puede estar y de los autocoros, no da la sensación de que su voz sea lo más importante del álbum, con todas las ideas que aparecen desperdigadas en él.

En este debut de nombre difícil, ‘Still Unstirred’, hay lugar para la instrumentación ambiental que tanto gusta a los Antlers, dejando momentos llenos de romanticismo e intimidad por ejemplo en ‘A tu rareza’ («tell the sun not to come / we’re fine just being two (…) I don’t want to wake if it’s not to see you»); para la recreación tribal en la percusión, como en ‘I’ll Stop This Roll-Playing’, pero siempre sin ni siquiera acercarse a los peligros de ‘El rey león’ o Safri Duo (seguro que la experimentada producción de Suso Sáiz ha tenido mucho que ver en eso); y para las virguerías experimentales y vocales de gente como tUnE-yArDs, a la que puede recordar la resultona, breve y adictiva ‘Balai Lama’.

La originalidad de este tema (sobre alguien destinado a ser un líder religioso que prefiere volver a la vida terrenal) junto a la individualidad reclamada en ‘Roll Rolling’ ponen un par de notas de color en un disco que habla de desamor, aunque bien es verdad que mis pasajes favoritos del mismo se producen gracias a la habilidad de Belén para pasar del inglés al castellano con total naturalidad en momentos estratégicos del álbum que sí, hablan de amor. Mucho se ha debatido si los artistas de nuestro país tienen que cantar en inglés o en castellano… y ha sido para nada. Cuando Bel Bee Bee entona de repente en nuestro idioma eso de «quiero cruzarlo / no detenerme / quién me dirá cuando parar / quiero dártelo todo / quiero que quieras / cuidarlo y poder cuidarte a ti» en ‘Killing the Nightingale’, o «desarmaré tu escudería, pieza a pieza… / a cámara lenta, sobre la mugre del suelo / te coronaré…» en ‘A tu rareza’, el efecto no puede ser más envolvente y purificador, más emocionante.

El álbum contiene algún tema algo lineal que entorpece el ritmo del tracklist, que habría agradecido la recuperación de algunas pistas de su primer Soundcloud (la country ‘Dallol’ se ha querido sacrificar en favor de una mayor coherencia estilística); pero hay recompensa más allá del single ‘Astrays Sculpture’: una excepcional de parte de una autora de nuestro país que tiene 18 años y no está en la cola de un concierto pillándose un pedo, sino de hecho ofreciendo ya mejores discos que muchos de los que están tocando dentro.

Bel Bee Bee actúa hoy martes en el Día de la Música Notodo de Madrid junto a Joshua Díaz, Tigres Leones y Grosgoroth.

Calificación: 7,5/10

Lo mejor: ‘Astrays Sculpture’, ‘A tu rareza’, ‘Killing the Nightingale’, ‘Balai Lama’
Te gustará si te gustan: SOHN, James Blake, CocoRosie, Xenia Rubinos
Escúchalo: Spotify

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Publicado por
Sebas E. Alonso
Tags: bel bee bee