Pero no contenta con crear un nuevo hit, Wendy nos sorprende ahora con un vídeo para esta versión, que literalmente nos ha dejado sin palabras. Cada vez más guapa y con más pinta de ir a convertirse en la estrella del pop que siempre debería haber sido, Wendy fusila algunos planos del vídeo original
(aunque con menos lágrima de por medio) mientras que en el resto se muestra bastante más comedida que la Cyrus, correteando por unas dunas y bailoteando en una discoteca no apta para propensos a crisis epilépticas.