Pero lejos de acabar ahí sus problemas, la experiencia de ver el clip fue un poco chapucera cuando comprobaron que faltaba un minuto del final del clip. Después de las quejas de los seguidores durante horas en las redes sociales, que convirtieron a Madonna en «trending topic» mundial durante varias horas, los representantes de la plataforma de streaming de Jay Z tuvieron que pedir disculpas a través de Twitter y retirar el vídeo de sus sistemas para, una hora más tarde, volver a subirlo, esta vez completo.
Ahora que el clip ya está en Youtube a excelente calidad, nos preguntamos si ha servido de algo esta exclusiva aparte de para perjudicar a la promoción de la canción.