“Esos tíos llenaban estadios y todavía lo hacen y es por la cultura de la música, la poesía, que es tan poderosa que cada vez que los fans se reúnen, se unen en la esencia de lo que es Iron Maiden. Siempre solía decir a la gente cuando me decían “Oh, es la nueva Madonna”. No, soy la nueva Iron Maiden”».
¿Dejarán ahora los seguidores de ambas cantantes la batalla o se unirán los incondicionales del legendario grupo británico?