Precisamente, este ‘Stuff Like That There’ recurre claramente a aquel espíritu perezoso de ‘Fakebook’, homenajeando también a algunas canciones de otros artistas, estrenando alguna que otra composición suya y trasladando también algunas canciones propias a esa faceta tranquila y delicada. Por eso se ha interpretado, erróneamente, que estamos ante un disco de rarezas, y basta una escucha para saber que estamos ante un genuino disco de Yo La Tengo. Ira, Georgia y James, ahora con la adición del guitarrista Dave Schramm (un ex miembro pre-‘Fakebook’ -precisamente- que se ha reunido con ellos en la grabación y posterior gira de este), hacen suyas con dulzura y cariño todas esas canciones procedentes de distintas épocas y autores para armar un conjunto unitario.
El resultado, aunque desigual en su capacidad para sorprender o emocionar, es desde luego encantador. Sus 45 minutos discurren con una placidez máxima (a veces demasiada), generalmente envolviéndonos en una bruma acústica, con unas delicadas guitarras eléctricas que ejercen de baliza. Es el caso de las nuevas ‘Rickety’ (con James McNew aportando músculo con el contrabajo) y ‘Awhileaway’, pero también de ‘I’m So Lonesome I Could Cry’ de Hank Williams (con Georgia llevando, con su estilo perezoso de cantar, a otro lugar este clásico del country) y una ‘Friday I’m In Love‘ que ha quedado bastante sosilla, reducida a poco más que una curiosidad. Pero ese filtro también lo aplican, con mejor tino, a las preciosas ‘Before We Stopped To Think
‘ de Great Plains (transformando por completo el original de estos semi-desconocidos precedentes del indie-rock norteamericano) y ‘Automatic Doom‘ de The Special Pillow, un grupo también de Hoboken (en el que participó McNew) que no ha corrido la misma suerte que ellos.En esa voluntad de reivindicación de autores y canciones desconocidos o poco valorados, está buena parte del acierto de ‘Stuff Like That There’. Yo La Tengo tienen la generosidad de poner de relieve a esos artistas y comparten sus gemas para que el gran público sepa de ellos. Así, recordamos (estoy bastante seguro de que pululaban por alguno de aquellos CDs que regalaban con la revista Factory) a Antietam (‘Naples‘), un grupo al que precisamente produjeron hace dos décadas los propios Georgia e Ira, o conocemos la faceta doo-wop, alejada de su típico jazz espacial, de Sun Ra (con la adorable ‘Somebody’s In Love‘ de The Cosmic Rays que cierra el álbum), o la más soul, alejada del P-Funk que le hizo popular, de George Clinton (con la estupenda ‘I Can Feel The Ice Melting‘ de los primigenios The Parliaments). Cierto es que, además de la de The Cure, revisiones tan poco alejadas de los originales como ‘Butchie’s Tune‘ de The Lovin’ Spoonful o las nuevas versiones de ‘All Your Secrets’ y ‘Deeper Into Movies’ son casi anecdóticas. Pero lo más bonito de ‘Stuff Like That There’ es, más que su carácter divulgativo, la apuesta por las canciones bonitas por encima de géneros y estilos, casi como una filosofía vital. Eso, hoy que todo funciona a una velocidad endiablada y estamos tan obsesionados con tal o cual producción, con la contemporaneidad o vigencia de tal o cual sonido, vuelve a ser una forma de rebeldía.
Yo La Tengo actúan hoy, 4 de septiembre, en Tibidabo Live Festival (Barcelona) y mañana, 5 de septiembre, en Kutxa Kultur Festibala (en Igeldo, Donosti).
Calificación: 7,3/10
Lo mejor: ‘Automatic Doom’, ‘Before We Stopped To Think’, ‘Rickety’, ‘I’m So Lonesome I Could Cry’.
Te gustará si te gusta: descubrir artistas y canciones poco reivindicados; las canciones bonitas.
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