Summer Camp / Bad Love

La primera impresión es muy clara: pasando de productores externos Summer Camp han conseguido un sonido mucho más interesante que el que Steve Mackey imprimió a ‘Welcome To Condale‘ (2011). También compositivamente han madurado, porque estas 11 canciones forman una sólida playlist sin relleno, indicativa de una criba mucho más sabia que la docena y media de canciones del susodicho «Condale» (vale, en su versión CD con bonus tracks). Temáticamente se alejan por primera vez de su afán como recolectores de clichés, una idea que en sus deliciosos primeros singles resultaba graciosa pero que ya en su LP de debut llegaba a agotarse un poco, en sus letras con referencias constantes a la iconografía del cine adolescente y la estética retro-ochentera. Justificadas, eso sí, en su disco del año pasado, la BSO de ‘Beyond Clueless’, documental precisamente dedicado a ese tipo de cine.

‘Bad Love’ rompe pues en el aspecto letrístico, y se presenta como una colección de reflexiones sobre justamente eso: amores malos, frustrados, que no funcionaron. Sin el leve lastre del retro-cliché, las nuevas canciones cobran una dimensión mucho más rica, y la producción propia hace que las canciones suenen mucho más seductoras: un sonido melódico pero con los suficientes elementos disonantes para resultar interesante, casi como un regreso a aquel feliz y extraño debut de 2010 con ‘Ghost Train‘. Con los dos pies puestos en los 80 y los 90, sí, pero combinados con chispa. Todo esto se hace evidente en los mejores cortes de ‘Bad Love’: ‘Beautiful’ y sus arreglos a base de bajos y guitarras distorsionadas, sintes ruidistas y la voz de Elizabeth Sankey deliciosamente comedida, ingredientes perfectos para una letra sobre lo claustrofóbico de enamorarse de alguien con quien nunca llegarás a hablar. O ‘Run Away’ y su atractiva parquedad rítmica e instrumental y pasajes armónicamente muy interesantes. O ese final espléndido de ‘Keep Up’, entre el tecnopunk y Shampoo.

Pero también en las canciones más producidas hay detalles cautivadores, y (lo más importante) grandes melodías, que crecen con cada escucha. ‘If You Hate Me’, ‘Bad Love’ o ‘Sleepwalking’ son joyas de synthpop melancólico que mantienen el interés en el disco de cabo a rabo. La letra de ésta última es una conmovedora evocación de la desesperación de la soledad («Can you lift me up? I don’t care how / Lift me up, I don’t care how»). Rodeados de guitarras funk y un singular ritmo, estos versos inducen a un agridulce baile. Una combinación entre fiesta y melancolía que sobrevuela prácticamente todo el disco y lo hace especialmente atractivo. Con ‘Bad Love’ Summer Camp ha conseguido por fin grabar el disco que siempre parecía podían conseguir.

Calificación: 8/10

Lo mejor: ‘If You Hate Me’, ‘Beautiful’, ‘Keep Up’.
Te gustará si: te gusta el pop agridulce, si te interesa la banda, o si te atraía su música pero su rollo teenager te echaba para atrás.
Escúchalo: Spotify

Los comentarios de Disqus están cargando....
Share
Publicado por
Jaime Cristóbal
Tags: summer camp