Después de 4 años y un EP de su líder -Andrés Nusser- en solitario bajo el seudónimo Karakoram-Mekong, la banda regresa con un trabajo titulado ‘Chicos De La Luz’. Y donde su debut era una fiesta descontrolada en la que todo el desfase tenía sentido, esta continuación pretende ser la consecuencia directa: la resaca de aquello, y como buena resaca, no deja a nadie indiferente.
En esta ocasión, el grupo se preocupa un poco más por las melodías, por contenerse un poco y dar una lección de madurez, sin comprender que fue aquella falta de contención lo que más nos cautivó de su debut. Además, da la impresión de que tampoco quieren arriesgarse a perder lo que les funcionó antes, y es ahí donde se encuentra el principal error de este segundo trabajo.
Canciones como ‘Danza Celestial’, ‘Kafka’ o ‘Rico’ hablan en ese tono más pausado que no era tan evidente en su debut, con unas melodías mucho más tranquilas y con unas letras que de claras y tópicas nos desconciertan por momentos. En el otro lado tenemos ‘Caribbean’, un primer sencillo que dicen inspirado en Enya, ‘Druida’ o ‘Dimensión Suprema’, donde se muestran más juguetones y mucho más afines a lo que se espera de ellos.
Es tras esta dicotomía donde notamos su indeterminación, además con un bajón bastante marcado en una segunda mitad muchísimo más calmada que la primera. No podemos hablar de un mal disco, pero una vez superada la sorpresa inicial de su debut, deberían haber optado, como hicieron MGMT en su momento, por hacer un disco que, aunque estaba a años luz de su debut, mantenía una unidad estilística de principio a fin. Si lo que querían era mostrar evolución, han fallado. Si querían demostrar que estaban más allá de lo que se esperaba de ellos, también. Ahora, si lo que pretendían era hacer canciones notables sin importar su unidad y conexión dentro de la secuencia de un álbum, en eso no han fracasado totalmente.
Calificación: 6,5/10
Lo mejor: ‘Druida’, ‘Rico’, ‘Kafka’, ‘Caribbean’
Te gustará si te gusta: MGMT, El Guincho, Animal Collective.
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