Lo extraño de todo este asunto es la agresión en sí, pues la rapera supuestamente no solo propinó a la guardia un puñetazo (no se sabe si a traición como el de Mariano Rajoy) sino que además le mordió en uno de sus pechos. Banks fue expulsada de la discoteca a eso de las 12 de la noche y detenida después acusada de asalto en tercer grado. Posteriormente fue puesta en libertad provisional sin cargos. Se desconoce el motivo del altercado.
Hace unos meses, Banks era objeto de polémica por llamar «puto maricón» a un miembro de la tripulación durante un vuelo después de pelearse con una pareja francesa. Supuestamente, esta le bloqueó el paso a la salida, esta intentó colarse, uno de ellos le dio un golpe y ella le escupió en la cara. El azafato recibió el insulto después de intentar calmarla.