«Después de unas cuantas de reproducciones de ‘Bajo el volcán’, aún no tengo muy claro si lo nuevo de Love of Lesbian me gusta o no. Me hace tilín ese inicio tan a lo Dire Straits o Fleetwood Mac… Perdón, tan a lo The War on Drugs haciendo de Dire Straits o Fleetwood Mac. Me gusta ese punteo de guitarra que se deja oír un par de veces; es bonito el brillo estival que respira la canción por momentos; hay destellos que demuestran que Santi Balmes sigue teniendo su olfato pop en forma… pero creo que esta vez la jugada no les sale redonda. Porque no acabo de entender la deriva de la canción, ni ese estribillo, ni ese tramo de la mitad, ni ese «crescendo» épico tan metido con calzador. Son elementos que, dentro de la canción, parecen no guardar mucha relación entre sí. Al final no sé muy bien qué intentan explicarme y se me acaba haciendo muy larga. Me da la sensación de que han querido cocinar un tema memorable metiendo muchos ingredientes a la vez: tirar por la vena «ochentista», reproducir una atmósfera muy determinada pero a la vez ser intensos, románticos… y no acaban de cuajar todas estas vertientes». Mireia Pería.
«Pocos grupos -nacionales o internacionales- logran un equilibrio tan natural entre elementos orgánicos clásicos del pop-rock y elementos electrónicos como Love of Lesbian. ‘Bajo el volcán’ es otro ejemplo más de su larga carrera y a la sutileza de los teclados hay que sumar ahora esa coda en la que recuerdan a los Phoenix más bailables y veraniegos. Personalmente prefiero su vena payasa en la línea de ‘Si tú me dices Ben, yo digo Affleck’ -hay tan pocos grupos que recurran al sentido del humor…-, pero bien por ellos. Eso sí, ¿no es ‘Bajo el volcán’ más un buen tema para el tracklist de su disco que un espectacular single de regreso?». Sebas E. Alonso
.«Por melodía, sonido y estructura, ‘Bajo el volcán’ podría ser, una conclusión perfecta para el nuevo disco de Love of Lesbian, ‘El poeta Halley’. Su estribillo eufórico pero ligeramente abatido, acompañado de una letra doliente y reflexiva, y sus punteos de guitarra a lo The Smiths inspiran, sencillamente, la imagen de un fracaso, de una despedida, de un fin. «Ya no hay nada en mí», lamenta Balmes, apesadumbrado. «Solo restos que destruyen / y un huracán crecido en su arrogancia / a duras penas se dio cuenta / que arrasó bajo el volcán», canta Balmes. Pero no, ‘Bajo el volcán’ remonta al final con unas guitarras y unas campanillas radiantes que edifican y revigorizan el tema hacia una dirección mucho más esperanzadora. ¿Hacia un nuevo principio, quizás? No lo sé, pero qué canción tan hermosa, de todas formas. Un muy buen comienzo». JB.