La Unión de Actores ha comunicado esta tarde el fallecimiento del actor Ángel de Andrés López, a la edad de 64 años. Tras curtirse como actor de teatro independiente en su juventud (época en la que, se dice, fue pareja de Alaska), Ángel de Andrés López (lo del segundo apellido era para evitar la confusión con su tío, el también actor Ángel de Andrés) debutó en el cine de la mano de Pedro Almodóvar, con dos papeles secundarios pero imborrables en ‘¿Qué he hecho yo para merecer esto?’, en la que representaba al marido de Carmen Maura, y la ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’. A partir de ahí se consolidó como un rostro habitual en el elenco secundario del cine de los 80 y 90, como ‘Las cosas del querer’ (Jaime Chávarri), ‘Taxi’ (Carlos Saura), ‘El perro del hortelano’ (Pilar Miró) o ‘¿De qué se ríen las mujeres?’ (Joaquín Oristrell).
Pero fue después, y en el ámbito televisivo, donde logró mayores cotas de popularidad, gracias a su papel protagonista en la comedia ‘Manos a la obra’, en la que formaba una grotesca pareja de albañiles junto al gran Carlos Iglesias. El humor de esta serie, equidistante de lo zafio y lo surrealista, logró captar un amplio espectro de público que mantuvo la serie en antena durante seis temporadas, más un comeback menos exitoso, años después. A partir de ahí, en los 2000, salvo algunos papeles de cierta importancia que le ofrecieron Álex de la Iglesia (‘800 balas’) y Corbacho & Cruz (‘Tapas’, la serie ‘Pelotas’), mantuvo un perfil más discreto, con pequeños papeles en cine, teatro y televisión. Su último trabajo ha sido la interpretación del Papa Clemente en la serie histórica de RTVE ‘Carlos, Rey Emperador‘.
