Aunque en principio no se especificó cuáles, desde El País aseguran que se trata de fentanyl, entre 25 y 50 veces más potente que la heroína. Los representantes de Prince habían pedido ayuda al Dr. Howard Kornfeld, un día antes de que apareciera muerto en el ascensor de su casa en la mañana del 21 de abril (hora local). Este doctor es un especialista en adicción a los fármacos para controlar el dolor, por lo que se piensa que Prince era adicto a los calmantes para superar los fuertes dolores que sufría, quizá debidos a una operación de cadera hace unos años. Prince tenía una cita con este médico especialista el 22 de abril, tan solo un día después de su muerte. Una semana antes, el avión privado en el que volaba volviendo de un concierto había realizado un aterrizaje de emergencia. Según la versión oficial, Prince sufría un gripe y estaba exhausto y deshidratado, pero según TMZ fue en verdad tratado de otra sobredosis. Los médicos le pidieron que permaneciera ingresado un tiempo, pero Prince se negó.