Puede comprarse una edición física y limitada del mismo, una cápsula USB numerada que incluye los tres temas que componen el álbum, más sendos remixes y vídeos (los audiovisuales que acompañaban el directo, como el de ‘El ravero‘), y un fanzine digital con información adicional sobre la propuesta, material de fotos y vídeo, así como acceso a las pistas para poder generar remezclas de forma libre. Está disponible para compra y libre descarga en la web de Telegrama, y también hay streaming en Soundcloud.
Como decíamos, Niño de Elche (ganador, recordemos, del I Premio Ruido hace unos meses por su disco ‘Voces del extremo
‘) y Los Voluble presentan el viernes, en Sónar Día, ‘En el nombre de’, su nuevo espectáculo espectáculo audiovisual. En él «se centran en las fronteras, navegan por estilos industriales, el reggaeton, la guajira o los romances y se apoyan en textos de Ignacio Miranda y el filósofo queer Paul B. Preciado». Dice su nota de prensa:«Es bastante habitual escuchar aquello de que las personas que migran nos traen violencia, inseguridad y hacen peligrar nuestro modo de vida occidental y acomodado, sin embargo, también las migraciones, han propiciado el desarrollo cultural en general, y de la música en particular, a lo largo de la historia. El blues de los campos de esclavos, el footwork aparecido entre la comunidad más pobre de Chicago, en su mayoría migrantes, los cantes de ida y vuelta propiciados por el paso del flamenco por Cuba, o el reggaeton, mezcla del hip hop de ambas costas con los ritmos latinos importados desde el sur del continente americano hacia el norte de los Estados Unidos y luego al resto del mundo, son algunos ejemplos.
Sin embargo, según las noticias que leemos a diario, la frontera es más muerte que música. Un mar mediterráneo que aloja a más de 30.000 muertos según The Migrant Files, solo en los últimos 14 años y un gasto en protección y seguridad que supera con creces lo invertido en apoyo a los refugiados y a la defensa de los derechos humanos en situaciones como la de Siria, ponen de relevancia un problema que creemos que está en las puertas de nuestras casas, pero que habita en lo más profundo de nuestras sociedades».
“Nuestras ciudades y sociedades están construido desde el colonialismo más profundo, solo hay que echar un vistazo al callejero. Decolonizar los imaginarios se hace también urgente.” Niño de Elche y Los Voluble.
Por último, no podemos olvidar destacar que hace unos días Niño de Elche y los post-metaleros Toundra presentaron el primer tema colaborativo de su proyecto común, llamado ‘Exquirla’ y que comenzó a gestarse poco después de conocerse en la pasada edición de Monkey Week. Se trata de ‘Canción de amor de San Sebasián’, un tema compuesto por el cantaor (el primero que compuso en su vida, asegura en el vídeo) pensado para un espectáculo versado en la obra de Francis Bacon. Paco Contreras, que así se llama Niño de Elche, afirma que siempre imaginó esa canción interpretada por una banda de rock. Escuchándola, es evidente que la química de este proyecto artístico es enorme, y lleva lo conseguido por Enrique Morente y Lagartija Nick en el icónico ‘Omega’ un paso más allá.
