Wild Honey es el proyecto de Guillermo Farré, altamente influenciado por el pop de los 60, la psicodelia y las armonías vocales perfectas (no en vano se bautizaba como una canción de Beach Boys). Tras editar el pasado año el soberbio EP en castellano ‘Montaña de plata
‘, en estos días se dispone a mezclar el que será su tercer largo. Por su parte, Remate es un curtido cantautor al margen de convenciones y modas que, pese a comenzar muy influido por el auge de la Americana en los primeros 00s, poco a poco ha ido abriendo su abanico estilístico. Este año han visto la luz dos singulares obras suyas: por un lado, el álbum ‘Cabello de Ángel, Tocino de Cielo‘, un «musical hieperrealista»; y por otro, la banda sonora para ‘Un corazón roto no es como un jarrón roto o un florero’, un corto en clave de humor dirigido por Isabel Coixet. Por el momento, se desconoce si esta colaboración irá más allá de este tema, pero ojalá.